• El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, en el Congreso de las Comunas y Movimientos Sociales celebrado en el estado Miranda, 20 de octubre de 2018.
Publicada: domingo, 21 de octubre de 2018 11:20

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, arremete contra el capitalismo y lo culpa de la crisis migratoria que afecta a Centroamérica.

“Hombres y mujeres centroamericanos que han iniciado una gran marcha hacia los Estados Unidos llevando su dolor, su miseria, su pobreza, su necesidad; ¿quién es responsable de eso? el capitalismo, dependiente, neocolonial, que domina a los países (…) ellos son los responsables”, aseveró el sábado el mandatario venezolano.

En el marco del Congreso de las Comunas y Movimientos Sociales, en San Antonio de los Altos, situado en el estado Miranda, Maduro pidió al Gobierno estadounidense, presidido por Donald Trump, la apertura de las fronteras sureñas para recibir a los migrantes centroamericanos.

Sin embargo, Trump ha amenazado a los países centroamericanos y, en particular a México como punto final de la caminata, con detener la ayuda económica y militarizar la frontera, si no detienen la caravana de miles de ciudadanos centroamericanos, mayormente de origen hondureño, que busca llegar a Estados Unidos. 

Hombres y mujeres centroamericanos que han iniciado una gran marcha hacia los Estados Unidos llevando su dolor, su miseria, su pobreza, su necesidad; ¿quién es responsable de eso? el capitalismo, dependiente, neocolonial, que domina a los países (…) ellos son los responsables”, aseveró el mandatario venezolano, Nicolás Maduro.

 

Maduro, en otra parte de su alocución, volvió a solicitar a su homólogo estadounidense que abriese las puertas de su país por respeto a la humanidad y la legalidad internacional, “en vez de estar gastando miles de millones en misiles y bombas para la guerra”, adujo.

De este modo, Maduro deplora la táctica del miedo que usa Trump para justificarse ante los estadounidenses de tildar a los migrantes de criminales y narcotraficantes. 

El inquilino de la Casa Blanca ordenó hace unos meses una ley denominada “tolerancia cero”, que faculta a las autoridades fronterizas estadounidenses a separar las familias migrantes, padres de hijos, sin contemplar las nefastas consecuencias.

krd/ncl/mnz/msf