Los terroristas de Frente Al-Nusra, la rama siria de Al-Qaeda, consiguieron añadir varias armas ligeras y pesadas a su arsenal, entre las que había ametralladoras, cohetes antitanques y municiones de artillería.
Entre otros enseres, también consiguieron hacerse con cajas de alimentos, que según alega Washington, “están destinadas al pueblo sirio” cuando en realidad habían sido enviadas a los grupos armados.
Los integrantes del Frente Al-Nusra exhibieron las nuevas armas adquiridas durante el saqueo a la base de Hazm, en un video publicado en Youtube.
No es la primera vez que estos terroristas se hacen con el control de armas y equipos militares enviados a los llamados moderados sirios.
Hazm, uno de los conocidos grupos armados respaldados por Estados Unidos en Siria, anunció su disolución tras una serie de derrotas sufridas frente a otras bandas armadas.
Este grupo terrorista formaba parte del autodenominado Ejército Libre Sirio (ELS), la fuerza militar de una coalición de los opositores armados de Siria a la que Washington considera “moderada” y apoya abiertamente para materializar su objetivo de derrocar al Gobierno del presidente sirio, Bashar al-Asad.
La violencia desatada por estos grupos respaldados desde el extranjero ha dejado más de 200.000 muertos y millones de desplazados en Siria desde el comienzo del conflicto.
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