“Aquí los principios son los mismos. Es una violación del proceso de fijación de precios por el mercado, una invasión del proceso de fijación de precios de mercado. Cualquier referencia a un techo es inaceptable”, aseveró el lunes, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, conforme a la agencia de noticias local RIA Novosti.
Asimismo, acentuó que “tomará tiempo sopesar cuidadosamente los pros y los contras en la elaboración” de medidas que tomará Rusia; sin embargo, acotó que la reacción de Moscú a cualquier decisión sobre el gas será similar a las acciones por el petróleo. “Usted sabe que la cuestión del tope al petróleo se ha prolongado un poco. Pero se publicará, y lo mismo ocurrirá con el gas. Tomará algún tiempo”, puso de relieve.
Los siete países de la Unión Europea (UE) aprobaron el mismo lunes un mecanismo con el fin de limitar temporalmente el precio del gas natural a 180 euros por megavatio/hora, de acuerdo con el comunicado publicado por el Consejo Europeo.
El mecanismo se pondrá en marcha a partir del 15 de febrero del próximo año solo en el caso de que la diferencia con respecto a los precios mundiales del gas natural licuado (GNL) es superior a 35 euros.
La UE depende de Rusia para el abastecimiento de un 40 % del gas natural que consume regularmente. Además, una parte significativa de las importaciones de petróleo de los países del bloque comunitario en 2021 provenían de este país.
Mientras tanto, la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) advirtió el 13 diciembre que la UE podría sufrir una severa escasez de gas también el año próximo, debido a las sanciones que impuso contra Rusia por el conflicto en Ucrania; Kiev exigió a sus aliados occidentales el suministro de gas natural.
Por su parte, las autoridades rusas han confirmado en diversas ocasiones que tales medidas por parte de los países occidentales solo agravan la situación y “pueden complicar considerablemente la situación en los mercados energéticos mundiales. Además, han anunciado que la Federación Rusa no venderá petróleo a los gobiernos que “se unan a la limitación de su precio”.
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