Tras su destierro del Valle de los Caídos, la familia de Franco quieren que sus restos descansen en esta iglesia ubicada en pleno centro de la capital española (Madrid).
Medio centenar de colectivos, víctimas del franquismo, organizaciones vecinales, políticas y sindicales se han echado a la calle. Todos valoran positivamente que se destierre al dictador del Valle de los Caídos, promovido por el precursor de la Ley de Memoria Histórica, José Luis Rodríguez Zapatero.
La polémica surge en que el generalísimo sea llevado a una cripta de la catedral de la Almudena, en pleno centro de Madrid.
Para evitar el traslado, los convocantes de la protesta han iniciado una campaña a través de Change.org, en la que han recopilado más de 100 000 firmas.
La exhumación se podrá realizar gracias a un decreto ley impulsado por el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
La familia del caudillo quiere que sus restos reposen en una sepultura de su dominio, en un piso subterráneo de la iglesia madrileña. Por el momento, el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro, ha dicho que no puede oponerse al tratarse de una propiedad privada. A la espera de un traslado discreto, el Gobierno quiere evitar que este lugar se convierta en un lugar de peregrinación para franquistas.
Alejandro Melgares, Madrid.
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