Los jornaleros de San Quintín en su mayoría indígenas, ganan menos de 9 dólares al día. Trabajan sin contrato escrito, la mayoría viven en hacinamiento en refugios en mal estado y algunos mueren de cansancio y deshidratación.
Los jornaleros salieron de los sembradíos a protestar a las carreteras y lograron llamar la atención de todo el país. Estos trabajadores que padecen hambre y sed todos los días en unos de los trabajos más duros de toda la cadena alimenticia.
Según jornaleros, este acto de protesta es el inicio de una serie de protestas para exigir los derechos mínimos laborales de millones de personas que se dedican a recolectar hortalizas en todo el país.
Arturo Calvilllo, Ciudad de México.
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