Según los informes, los tres países europeos han planeado presentar un proyecto de resolución a la Junta de Gobernadores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) en su próxima reunión el 9 de junio. La troika europea busca activar la reimposición de todas las sanciones de las Naciones Unidas contra Teherán antes de que el denominado “mecanismo Snapback” expire en octubre.
Ante tal coyuntura, el ministro de Asuntos Exteriores de Irán, Seyed Abás Araqchi, mediante una publicación en su cuenta de X, ha calificado de “grave error estratégico” la medida adoptada de los países europeos ante el caso nuclear iraní.
“Recuerden mis palabras mientras Europa reflexiona sobre otro grave error estratégico: Irán reaccionará con firmeza ante cualquier violación de sus derechos. La culpa recae exclusivamente en actores irresponsables que no se detienen ante nada para ganar relevancia”, ha advertido.
Ha destacado que la “buena cooperación” de Irán con la AIEA “resultó en una resolución que cerró las acusaciones malignas de una ‘posible dimensión militar’ (PMD) en el programa nuclear pacífico de Irán”.
Europa opta por “acciones malignas” contra Irán
Araqchi ha subrayado que, la troika europea “en lugar de actuar de buena fe”, está optando por “acciones malignas” contra Irán en la Junta de Gobernadores del OIEA.
“Cuando el E3 incurrió en la misma conducta infame en 2005, el resultado, en muchos sentidos, fue el verdadero nacimiento del enriquecimiento de uranio en Irán. ¿De verdad no ha aprendido nada el E3 en las últimas dos décadas?”, ha recalcado.
El jefe de la Diplomacia iraní ha puesto de relieve que las “falsas acusaciones” de que Irán está violando el Acuerdo de Salvaguardias (basadas en informes de mala calidad y politizados) “están claramente diseñadas para producir una crisis”.
Según los expertos, una resolución de la AIEA podría complicar aún más las conversaciones nucleares entre Teherán y Washington. Teherán ya se ha comprometido a tomar contramedidas decisivas si se activa el mecanismo de restitución rápida, denominado “Snapback”.
El lunes, el director de la AIEA, Rafael Mariano Grossi, recibió una reprimenda en El Cairo por parte de Araghchi, quien le recordó su deber de cumplir profesionalmente sus obligaciones estatutarias.
Araghchi dijo que “la AIEA no debe permitir que su credibilidad se vea socavada por motivos políticos y presiones de algunos estados miembros”, aparentemente refiriéndose al E3.
Desde la primera quincena de abril, Irán y Estados Unidos han mantenido cinco rondas de conversaciones indirectas con el objetivo de alcanzar un acuerdo sobre el programa nuclear iraní y el levantamiento de las sanciones impuestas a Teherán.
Sin embargo, estos diálogos se han visto empañados por medidas contradictorias, como la imposición de sanciones, retóricas amenazantes o exigencias excesivas por parte de Washington.
El miércoles, el canciller iraní reiteró la línea roja trazada por Teherán sobre negociaciones nucleares, enfatizando que no habrá un acuerdo que no abarque el enriquecimiento.
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