El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Ismail Baqai, ha subrayado este miércoles que el régimen israelí no permite la entrada de alimentos a Gaza y ha cortado el suministro eléctrico en el enclave con el objetivo de sumir en la hambruna al oprimido pueblo palestino.
“Es un ejemplo de crimen de lesa humanidad y de la continuación del genocidio y lo condeno enérgicamente”, ha aseverado Baqai.
Refiriéndose a la reiterada violación israelí del acuerdo de alto el fuego, el vocero iraní ha recordado la responsabilidad conjunta y colectiva de todos los gobiernos de poner fin a las graves violaciones del derecho internacional humanitario, que sin duda, constituyen crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Ha pedido también el fin de la inacción del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU) y otros organismos internacionales competentes para hacer frente a los crímenes del régimen ocupante y la continuación del genocidio en Gaza.
El régimen israelí lanzó la campaña de genocidio en Gaza el 7 de octubre de 2023. Hasta ahora ha asesinado allí a más de 48 500 palestinos.
En enero, Israel se vio obligado a aceptar un acuerdo de alto el fuego con el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ante el fracaso del régimen en lograr alguno de sus objetivos, incluida la “eliminación” del movimiento de resistencia palestino o la liberación de cautivos israelíes en Gaza por la fuerza.
A principios de marzo, finalizó la primera fase del acuerdo de alto el fuego en Gaza, que duró 42 días, pero Israel evita entrar en la segunda fase, que plantea el fin definitivo de la guerra.
Nada más finalizada la primera fase del acuerdo, Israel volvió a cerrar todos los cruces que conducen a Gaza, impidiendo la entrada de ayuda humanitaria; una maniobra destinada a utilizar la hambruna como herramienta de presión para obligar a HAMAS a aceptar sus dictados, mientras que posteriormente cortó el suministro eléctrico.
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