Según los medios locales, unas 3000 personas asistieron el sábado a una manifestación organizada en Madrid, la capital, para reclamar el fin inmediato del “genocidio” israelí y la ruptura de relaciones con Israel.
Enarbolando las imágenes de Abu Obeida, el portavoz de las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, rama armada del Movimiento de la Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), y del portavoz del Ejército de Yemen, el teniente general Yahya Sari, los manifestantes portaban pancartas en las que los describían como “Héroes”.
Los manifestantes, envueltos en banderas y pañuelos palestinos, exigieron “sanciones” contra Israel por vulnerar los derechos humanos en Gaza.
“Exigimos a la comunidad internacional que haga más, y también instamos a que desde el Gobierno de España nos comprometamos más, porque es imprescindible acabar ya con esta barbarie”, declaró la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, quien, junto a un número de autoridades, participó en la marcha.
En la misma jornada, se registraron protestas a favor de Palestina en el Reino Unido, EE.UU., Italia, Suecia e Irlanda, donde la gente exigió que Israel detuviera su ofensiva sobre Rafah y pidió un alto el fuego tras más de cuatro meses de ataques que han dejado cerca de 29 000 palestinos muertos.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, informó el miércoles sobre la solicitud conjunta de España e Irlanda a la Unión Europea (UE) ante la situación insostenible en el enclave costero por una inminente catástrofe humanitaria.
En una carta dirigida a la Comisión Europea (CE), los dos países europeos solicitaron “una evaluación urgente del Acuerdo de Asociación UE/Israel para que investigue si se están cumpliendo los puntos esenciales de la relación en materia de derechos humanos y principios democráticos”.
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