El periódico Israel Hum revela este viernes el plan de Israel y Estados Unidos de trasladar al pueblo de Gaza a cuatro países: Turquía, Egipto, Irak y Yemen, a cambio de incentivos económicos para estos países.
El plan se comunicó a los altos funcionarios de los partidos Demócrata y Republicano en la Cámara de Representantes y el Senado de Estados Unidos y obtuvo su aprobación, según el periódico, y tiene como objetivo animar a la población gazatí a abandonar esta zona voluntariamente y empezar una nueva vida.
Se están considerando un total de cuatro planes, de acuerdo a los cuales, se han considerado incentivos tanto para los residentes de Gaza como para los países de destino.
Aunque el Gobierno estadounidense anunció en las primeras etapas de la guerra que se opondría al desplazamiento forzado de la población de Gaza, las declaraciones oficiales muestran que la Administración del presidente estadounidense, Joe Biden, no se opondrá a una retirada voluntaria.
“Este plan depende de la solución del problema de que el Movimiento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS) permita salir a los residentes de Gaza, y Egipto les abra sus fronteras. La única manera moral es garantizar que Egipto abra sus fronteras y permita que el pueblo de Gaza escape del control de Israel y HAMAS”, afirma Joy Wilson, responsable del proyecto.
Así el Gobierno egipcio puede utilizar los 1300 millones de dólares de ayuda para los refugiados que lleguen al país desde Gaza.
“Egipto no debería ser el único país que acepta refugiados, Irak y Yemen reciben alrededor de mil millones de dólares en ayuda exterior de Estados Unidos, y Turquía recibe más de 150 millones de dólares, cada uno de estos países recibe suficiente ayuda exterior” añade Wilson.
Existe un tercer proyecto que se llama “Gaza para el mundo-Movimiento de migración humanitaria para los residentes de la Franja de Gaza”. Este plan fue elaborado por un miembro del partido Likud de Israel, Amir Whitman.
Este periódico israelí había revelado anteriormente un nuevo plan en el Congreso de los Estados Unidos, según el cual se concederá una importante ayuda financiera a varios países árabes, encabezados por Egipto, a cambio de aceptar refugiados de Gaza.
Pese a todas estas proyectos, los Gobiernos de Egipto y Jordania han declarado muchas veces que cualquier migración forzada de población de Gaza a estos países será una declaración de guerra contra ellos.
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