“La continua escalada de Israel en la Franja de Gaza y la suspensión del envío de combustible (al enclave) constituyen un acto de agresión peligroso e impredecible, y la ocupación (israelí) es responsable de todas las posibles consecuencias”, ha advertido este jueves en un comunicado el portavoz del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), Fawzi Barhum.
El vocero palestino ha dicho que políticas agresivas del régimen de Israel agravan las crisis que enfrentan los palestinos en la Franja de Gaza, paralizan la vida cotidiana de los gazatíes, además de que impiden la lucha que lleva a cabo el asediado enclave contra el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19.
El ejército israelí bombardeó objetivos de HAMAS en Gaza en la madrugada de este jueves y anunció la suspensión de la entrada de combustible a la franja, justificando que, con estas medidas, respondía al lanzamiento de supuestos cometas y globos incendiarios de grupos de jóvenes palestinos hacia los asentamientos israelíes en Palestina ocupada.
El ataque, conforme a un comunicado del ejército israelí, tenía como objetivo golpear lugares estratégicos y militares de HAMAS, entre ellos un sitio militar utilizado por combatientes navales, infraestructuras subterráneas y puestos de observación.
La prensa gazatí, sin embargo, ha anunciado que los ataques alcanzaron objetivos en toda la Franja de Gaza, desde la ciudad fronteriza de Rafah, en la parte sureña del enclave costero, hasta la ciudad de Beit Hanun, situada en el noreste de la franja.
Estos bombardeos se suman a los de los últimos días y a otras medidas restrictivas anunciadas por el régimen de Tel Aviv, como el cierre del único cruce comercial a Gaza, el de Kerem Shalom, y la disminución de la zona de pesca que Israel autorizada a los gazatíes de 15 a 8 millas náuticas.
La Franja de Gaza ha estado bajo bloqueo israelí por tierra, aire y mar desde junio de 2007; además, es blanco de frecuentes arremetidas de los soldados israelíes desde que estallaron las Marchas del Retorno, el 30 de marzo de 2018, que reclaman el derecho al regreso de los refugiados palestinos que abandonaron sus hogares o de los que tuvieron que huir en 1948, tras la creación ilegal del régimen de Tel Aviv.
ftm/rha/ftn/mjs
