Omar Shakir, representante de la oenegé internacional Human Rights Watch (HRW) en la Palestina ocupada, tomó un vuelo en el aeropuerto Ben Gurión de Tel Aviv rumbo a Múnich, en el sur de Alemania, tras ser expulsado por las autoridades israelíes.
Hace unas tres semanas, el tribunal supremo de Israel ratificó una orden de deportación en contra de Shakir, al considerar un acto de “boicot” sus investigaciones y llamamientos a empresas para que dejaran de facilitar los atropellos en los asentamientos ilegales israelíes en la Cisjordania ocupada.
Hablando con los periodistas antes de su expulsión, el activista resaltó que la medida muestra cómo Israel ha fracasado en silenciar al HRW, a pesar de la impunidad que tiene ese régimen en la represión de las organizaciones pro derechos humanos.
“Mientras no haya consecuencias a sus abusos regulares, mientras se mantenga la impunidad, veremos a más activistas bajo presión y un aumento de los abusos”, reprochó.
El representante de HRW, además, denunció que la “fea ocupación” israelí, se caracteriza por la discriminación institucionalizada y la represión sistemática de los derechos, en especial, de los palestinos.
Mientras no haya consecuencias a sus abusos regulares, mientras se mantenga la impunidad, veremos a más activistas bajo presión y un aumento de los abusos”, ha reprochado Omar Shakir, representante de Human Rights Watch (HRW) en la Palestina ocupada, tras ser expulsado por Israel.
De igual modo, advirtió que su expulsión allanará el camino para que Israel reprima cualquier organismo que investigue sus crimines o se enfrente contra su ilegal ocupación en los territorios palestinos.
“Hoy es apoyo al boicot, mañana será pedir al Tribunal Penal Internacional (TPI) que abra una investigación o, Dios no lo quiera, decir que Cisjordania está ocupada o que los asentamientos son ilegales, lo que son”, sostuvo.
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La expulsión de Shakir es la primera que tiene lugar en virtud de una ley israelí aprobada en 2017, que veta el ingreso a los territorios ocupados a quienes apoyen la campaña mundial de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS) o denuncien los asentamientos ilegales en la ocupada Cisjordania.
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Israel reprime con frecuencia a los grupos que respaldan la campaña mundial de BDS, que busca terminar con la violencia ejercida por Israel durante más de medio siglo contra millones de palestinos.
La iniciativa de BDS, que sigue ganando cada vez más adeptos a nivel internacional, busca, además, hacer frente al desalojo forzoso de los palestinos de sus hogares y al robo de tierras palestinas mediante la construcción de asentamientos ilegales en las ocupadas Cisjordania y Al-Quds.
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