Por Maryam Qarehgozlou
La Asociación Internacional de Expertos en Genocidio (IAGS, por sus siglas en inglés), un organismo académico compuesto por 500 miembros y fundado en 1994, es la más reciente en admitir que las políticas y acciones de Israel en Gaza, especialmente desde octubre de 2023, infringen los cinco criterios establecidos en la Convención de las Naciones Unidas para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948.
La resolución, de tres páginas, fue aprobada este lunes con un respaldo abrumador: el 86% de los miembros participantes votó a favor. Esta resolución constituye una intervención histórica por parte de las máximas autoridades académicas en derecho internacional sobre la guerra genocida en curso en Gaza.
La IAGS, la asociación de especialistas en genocidio más antigua y numerosa, concluyó que, desde la operación “Tormenta de Al-Aqsa”, el régimen de Israel ha cometido de forma sistemática y generalizada crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y actos de genocidio.
Entre estas acciones se incluyen ataques indiscriminados y deliberados contra civiles, personal médico y humanitario, periodistas e infraestructuras civiles, como hospitales, viviendas y comercios.
La resolución también señala el desplazamiento forzoso repetido de toda la población de Gaza, así como el asesinato o mutilación de más de 50,000 niños.
“Esta destrucción de una parte sustancial de un grupo constituye genocidio”, concluyó la asociación en su informe, aludiendo a los ataques brutales y deliberados de Israel contra la infancia.
La IAGS instó al régimen israelí a cesar de inmediato los ataques deliberados contra civiles, incluidos los niños; el uso del hambre como arma; la privación de ayuda humanitaria, agua, combustible y otros recursos esenciales; la violencia sexual y reproductiva; y el desplazamiento forzoso.
Melanie O’Brien, presidenta de la IAGS y profesora de derecho internacional en la Universidad de Australia Occidental, afirmó que “se trata de una declaración definitiva por parte de los expertos en estudios sobre genocidio de que lo que está ocurriendo en Gaza constituye un genocidio”.
Por su parte, Emily Sample, miembro de la junta directiva de la asociación, destacó que estaban “muy sorprendidos por el nivel de consenso alcanzado”.
Sample también señaló que el retraso en la publicación de esta resolución —meses después del inicio de la guerra— puede deberse al temor a sufrir “consecuencias personales y profesionales.”
Pérdida de empleo por denunciar
Según Sample, algunos miembros de la asociación han perdido sus empleos en Estados Unidos o se les ha denegado el visado para viajar a ese país por haber expresado públicamente su postura.
La resolución de la IAGS se suma a una creciente ola de voces —organizaciones de derechos humanos, expertos de la ONU y académicos— que han concluido que Israel está cometiendo un genocidio en Gaza, donde más de 63,600 personas —en su mayoría mujeres y niños— han sido asesinadas.
Israel enfrenta actualmente un juicio por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ), promovido por Sudáfrica, por violar el derecho internacional al cometer y no prevenir actos genocidas.
Además, la Corte Penal Internacional (CPI) ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el exministro de asuntos militares, Yoav Gallant, por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.
Francesca Albanese, relatora especial de la ONU para los Territorios Palestinos Ocupados, también elaboró dos informes el año pasado en los que afirma que se está llevando a cabo un genocidio en Gaza.
Actualmente, Albanese enfrenta sanciones por parte del gobierno de Estados Unidos y tiene prohibido viajar a los territorios palestinos ocupados.
Craig Mokhiber, abogado internacional de derechos humanos y exdirector de la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Nueva York, calificó en su carta de renuncia de octubre de 2023 las acciones de Israel como un “caso de genocidio de manual”, instando a la ONU a responder con mayor contundencia.
Mokhiber dimitió en protesta por la tibia respuesta de la organización ante la guerra genocida en Gaza y exigió que la ONU aplicara los mismos estándares a Israel que utiliza para evaluar violaciones de derechos humanos en otras partes del mundo.
La semana pasada, cientos de empleados de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos enviaron una carta al alto comisionado Volker Turk, instándolo a calificar explícitamente la guerra en Gaza como un genocidio en desarrollo.
División interna incluso en Israel
En los territorios ocupados por Israel, donde el respaldo público a la ofensiva en Gaza ha sido ampliamente mayoritario, han comenzado a surgir divisiones en el ámbito académico.
Shmuel Lederman, experto israelí en estudios sobre genocidio y teórico político en la Universidad Abierta de Israel y la Universidad de Haifa, afirmó que casi todos los académicos israelíes especializados en genocidio coinciden ya en que las acciones de Israel constituyen genocidio.
Un coro creciente que habla de genocidio
Aunque inicialmente se mostró reticente a utilizar el término, Lederman señaló que en los últimos meses un número creciente de académicos israelíes, en particular expertos en derecho internacional, han cambiado su postura, especialmente después de que Israel anunciara en marzo un bloqueo total de la ayuda humanitaria, lo cual desencadenó una hambruna provocada deliberadamente en el territorio asediado y devastado por la guerra.
“Lo que hemos visto desde finales de marzo —a raíz de la hambruna y de la declaración del objetivo de limpieza étnica como política oficial— es que no solo los expertos en genocidio, sino también un número cada vez mayor de juristas coinciden en que estamos presenciando un genocidio,” declaró Lederman, quien indicó haber llegado a esa misma conclusión en la primavera de 2024.
“La conclusión es clara: hay una razón por la que tantas personas en este campo coinciden. Es muy difícil ser un estudioso del genocidio y no reconocer que esto lo es,” añadió.
La opinión de uno de los mayores expertos mundiales
El profesor William Schabas, uno de los mayores especialistas mundiales en derecho penal internacional y estudios sobre genocidio, respaldó esta visión.
En una entrevista realizada el mes pasado por el Centro Europeo para Estudios del Populismo (ECPS), el profesor de la Universidad de Middlesex afirmó que el caso por genocidio presentado por Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) es “posiblemente el caso de genocidio más sólido que haya llegado jamás a la Corte.”
Schabas explicó que la intención genocida puede inferirse no solo de las acciones militares de Israel, sino también de las declaraciones de altos funcionarios, como las expresadas por Yoav Gallant, quien habló públicamente de cortar el suministro de comida, agua y electricidad a Gaza.
“No solo contamos con un patrón de conducta, sino también con declaraciones y señales claras de una política sistemática. Todos estos elementos deben considerarse conjuntamente al momento de emitir un juicio final,” afirmó Schabas, quien proviene de una familia de sobrevivientes del Holocausto.
También advirtió sobre la retórica populista de Benjamín Netanyahu, en la que presenta a la población de Gaza como una “amenaza existencial” para Israel: “La retórica populista y racista ha sido, históricamente, parte de contextos genocidas, ya que moviliza el respaldo popular a la comisión de atrocidades. Hoy vemos elementos de esa dinámica en Israel”.
Asimismo, alertó que Estados terceros, incluidos Estados Unidos, Alemania y Canadá, podrían enfrentar responsabilidades legales en virtud del Artículo III de la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, por brindar apoyo militar y político a Israel.
“Absolutamente un genocidio”
En abril, el profesor William Schabas afirmó que el ataque de Israel contra Gaza era “absolutamente” un genocidio.
Pocos días después de los acontecimientos del 7 de octubre y del devastador conflicto que siguió, Raz Segal, investigador israelí especializado en genocidio y profesor en la Universidad Stockton de Nueva Jersey (EE.UU.), calificó la ofensiva de Israel sobre Gaza como un caso de manual de “intención de cometer genocidio”.
Segal denunció que la excepcionalidad atribuida a Israel y las comparaciones de sus víctimas palestinas con “nazis” se utilizan para “justificar, racionalizar, negar, distorsionar y desligarse de la violencia masiva ejercida contra los palestinos.”
Un año después, en una entrevista con Vox, Segal reafirmó su postura diciendo que “sigo sosteniendo completamente mi descripción del ataque de Israel a Gaza como un ‘caso de genocidio de manual’, porque —casi un año después del inicio de esta agresión genocida— seguimos viendo declaraciones explícitas y sin vergüenza que expresan la intención de destruir.”
En julio, Omer Bartov, destacado académico israelí-estadounidense, escribió en una columna de opinión para el New York Times dijo que “soy un estudioso del genocidio. Sé reconocerlo cuando lo veo,” concluyendo que Israel está cometiendo genocidio contra el pueblo palestino”.
Bartov agregó que “mi conclusión, por dolorosa que sea, es ineludible: Israel está cometiendo un genocidio contra el pueblo palestino... Llevo más de 25 años enseñando sobre genocidio. Sé identificarlo cuando lo veo”.
En noviembre de 2023, Bartov consideraba que Israel había cometido crímenes de guerra, pero sostenía que las pruebas no alcanzaban el umbral legal para calificarlo como genocidio. Con el paso del tiempo, cambió de opinión, citando evidencia abrumadora.
Reconociendo su conflicto personal, Bartov —quien dice haber crecido en un “hogar sionista”, haber vivido en territorios ocupados y servido en el ejército israelí— admitió que resistió esa “dolorosa conclusión” durante el mayor tiempo posible.
Por su parte, Amos Goldberg, historiador y catedrático de Estudios del Holocausto en la Universidad Hebrea de Jerusalén, afirmó en octubre de 2024 que las acciones de Israel en Gaza —destrucción masiva, desplazamiento forzado y deshumanización— son propias de un genocidio.
Ernesto Verdeja, profesor asociado de Estudios de Paz y Política Global en el Instituto Kroc de la Universidad de Notre Dame y experto en estudios de genocidio, publicó en enero el artículo “El genocidio de Gaza en cinco crisis” en la Journal of Genocide Research, en una entrevista con Vox en octubre de 2024, sostuvo que la guerra en Gaza podía calificarse como genocidio “incluso en un sentido legal restringido, puede considerarse genocidio desde hace varios meses, dada la acumulación de ataques israelíes que apuntan de forma clara y sistemática a la población civil de Gaza”.
La presa de la negación se ha roto
Adam Jones, profesor de ciencia política en la Universidad de Columbia Británica y autor de un manual de referencia sobre genocidio, también declaró a Vox en esa misma fecha que “cualquier duda inicial que tenía sobre aplicar la etiqueta de ‘genocidio’ al ataque israelí contra Gaza se ha disipado tras un año de matanzas humanas, destrucción de hogares, infraestructuras y comunidades”.
Martin Shaw, profesor británico del Institut Barcelona d’Estudis Internacionals, profesor emérito de la Universidad de Sussex y autor del libro “What Is Genocide”, también ha descrito repetidamente la situación en Gaza como un genocidio, tanto en conferencias como en publicaciones.
En un artículo de julio para “New Lines Magazine”, titulado “La presa de la negación del genocidio en Gaza se ha roto”, Shaw criticó la reticencia de políticos y medios de comunicación a reconocer el genocidio en curso.
En diciembre de 2023, el Instituto Lemkin para la Prevención del Genocidio también declaró que la campaña israelí era genocida, citando la masiva cantidad de víctimas civiles, incluidos niños, decenas de miles de heridos y la retórica genocida explícita.
Una investigación de mayo realizada por el diario neerlandés NRC descubrió que un número creciente de líderes académicos en estudios sobre genocidio en todo el mundo creen que las acciones de Israel en Gaza constituyen un genocidio.
El artículo entrevistó a siete prominentes investigadores en genocidio de los Países Bajos, Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Croacia, Canadá y territorios ocupados, todos los cuales describieron la masacre israelí en Gaza como genocida.
Los científicos entrevistados incluyen a Lederman, Anthony Dirk Moses, profesor australiano en la City University de Nueva York y editor en jefe de la Journal of Genocide Research, O’Brien, Segal, Shaw, Ungor e Iva Vukusic, investigadora croata de genocidio en la Universidad de Utrecht. Muchos de ellos afirmaron que sus colegas comparten la misma opinión.
“¿Puedo nombrar a alguien cuyo trabajo respete que no piense que es genocidio? No, no hay ningún argumento en contra que tenga en cuenta toda la evidencia,” declaró Segal a NRC.
El profesor Ugur Umit Ungor de la Universidad de Ámsterdam y el NIOD Institute for War, Holocaust and Genocide Studies dijo que, si bien ciertamente hay investigadores que afirman que no se trata de genocidio, “no los conozco.”
El artículo de NRC revisó 25 artículos académicos recientes publicados en la Journal of Genocide Research, la principal revista del campo, y descubrió que “los ocho académicos del campo de estudios sobre genocidio ven genocidio o, al menos, violencia genocida en Gaza”. “Y eso es notable en un campo en el que no existe una claridad absoluta sobre qué es exactamente el genocidio,” añadió el informe.