“Quiero decirles que atacaremos al régimen en todo el país (…) Haremos esto por cualquier medio necesario, por aire o tierra”, en el caso de que las posiciones militares turcas, apostadas en la provincia siria de Idlib (noroeste), vuelvan a ser atacadas, ha señalado este miércoles el mandatario turco.
En declaraciones durante una reunión con los parlamentarios del gobernante Partido de Justicia y Desarrollo (AKP, por sus siglas en turco) en Ankara, la capital, Erdogan ha asegurado que su país está decidido a empujar a las fuerzas del Gobierno de Damasco más allá de los puestos de observación turcos en la región de Idlib a fines de febrero.
El mandatario turco, además, ha condenado el accionar de las fuerzas rusas de atacar, según su alegato, a los civiles “sin descanso” y “cometer masacres” en esta región estratégica.
Mientras tanto, el Gobierno ruso ha anunciado este mismo miércoles que el presidente ruso, Vladímir Putin, y su par turco quieren mantener y aplicar su acuerdo de distensión en Siria.
Ambos presidentes “subrayaron la importancia de la plena aplicación de los acuerdos ruso-turco”, según el Kremlin, refiriéndose sobre todo a la zona desmilitarizada creada en la región de Idlib, donde las fuerzas turcas y sirias se han enfrentado en los últimos días.
Putin y Erdogan discutieron “diversos aspectos de la solución de la crisis siria, en primer lugar y sobre todo en el contexto de un estallido en la zona de distensión en Idlib”, según el comunicado, que precisa que la conversación telefónica fue iniciativa de Ankara.
En septiembre de 2018, Moscú y Ankara acordaron crear en Idlib una zona desmilitarizada de 20 kilómetros entre el Ejército sirio y los grupos armados, pero las bandas extremistas, apoyadas por Ankara, siguen fortaleciendo sus posiciones y actualmente vuelven a desplegar en la provincia armas pesadas y dispositivos bélicos que retiraron en aplicación del acuerdo.
En respuesta a las constantes violaciones por parte de los terroristas del acuerdo de Sochi, el Ejército sirio ha intensificado sus bombardeos contra posiciones y cuarteles de las agrupaciones terroristas en Idlib para acabar definitivamente con la presencia de los extremistas en esta estratégica provincia.
En este sentido, el Gobierno de Siria ha denunciado el pernicioso rol de Turquía en la guerra siria y ha exigido a Ankara poner fin a su presencia militar ilegal en el país árabe.
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