• Combatientes del grupo Asaib Ahl Al-Haq durante una marcha en Bagdad, la capital de Irak, 31 de mayo de 2019. (Foto: AP)
Publicada: domingo, 28 de junio de 2020 9:14
Actualizada: domingo, 28 de junio de 2020 10:19

La coalición iraquí Al-Fath celebra el fracaso de Estados Unidos en sus complots para sembrar discordia entre las fuerzas populares y el Ejército de Irak.

Mujtar al-Musavi, miembro de la coalición Al-Fath en el Parlamento iraquí, aseveró el sábado que el Ejército y las Unidades de Movilización Popular (Al-Hashad Al-Shabi, en árabe) de Irak han hecho fracasar todas las conspiraciones internas y externas en su contra.

“Han fracasado los intentos de quienes se centraron en el estallido de una guerra entre las fuerzas antiterroristas y las Al-Hashad Al-Shabi”, señaló en declaraciones ofrecidas a la agencia iraquí de noticias Almaalomah.

En este sentido, Naim al-Abudi, otro miembro de la coalición Al-Fath —una de las facciones políticas iraquíes con mayor número de diputados— advirtió la misma jornada que EE.UU. considera a las fuerzas populares iraquíes un obstáculo para materializar sus planes contra el país árabe, por lo tanto, busca sembrar discordia entre las fuerzas iraquíes.

 

Una sede del Movimiento de Resistencia Islámica de Irak, conocido como Kataib Hezbolá, que forma parte de las Al-Hashad Al-Shabi, fue atacada la madrugada del viernes en una operación dentro del marco de la cual varios combatientes populares fueron detenidos, antes de que fueran trasladados a bases estadounidenses.

De acuerdo con medios locales, las fuerzas estadounidenses estuvieron implicadas en la operación, que, según fuentes militares iraquíes, se llevó a cabo por los servicios de seguridad de este país.

Por su parte, Qais al-Jazali, el líder del grupo Asaib Ahl Al-Haq, también parte de las Al-Hashad Al-Shabi, ha señalado que dicha operación “fue dictada por Estados Unidos”. Por ello, insiste en la necesidad primordial de la expulsión de los militares estadounidenses de Irak.

Después de que el Gobierno iraquí se alzó con la victoria frente a EIIL (Daesh, en árabe) en diciembre de 2017, las voces se intensificaron en el país para pedir la retirada inmediata de las fuerzas estadounidenses, que nunca lucharon contra terroristas, sino que los apoyaban. Entretanto, las llamadas para la expulsión de Washington de Irak aumentaron aún más en enero pasado, tras un ataque estadounidense en Bagdad (capital iraquí), que mató a varios combatientes iraníes e iraquíes.

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