La decisión para sancionar al régimen de Israel y sus entidades afiliadas fue impulsada por el Partido de los Verdes Escoceses, quienes alegan que las acciones militares israelíes en Gaza constituyen genocidio. Esta moción, que pone de relieve la solidaridad de Escocia con el pueblo palestino, se produjo en respuesta a la actual crisis humanitaria en el territorio asediado palestino.
La enmienda fue aprobada con 62 votos a favor y 31 en contra, instando a los gobiernos de Escocia y del Reino Unido a implementar una serie de boicots, estrategias de desinversión y sanciones dirigidas directamente al régimen de Israel y a las empresas consideradas cómplices de su genocidio.
La moción recibió el apoyo de los Verdes Escoceses y el Partido Nacional Escocés (SNP, por sus siglas en inglés), junto con una propuesta presentada por el secretario de Asuntos Exteriores, Angus Robertson, que impulsa también el reconocimiento de un Estado palestino independiente. Sin embargo, los Conservadores Escoceses se opusieron a la moción, mientras que la mayoría de los diputados laboristas y liberaldemócratas se abstuvieron.
El diputado escocés del Partido Verde, Patrick Harvie, quien presentó la moción, expresó su esperanza de que esta votación pudiera marcar un cambio en el debate sobre régimen de Israel y animar a otros gobiernos europeos a adoptar una respuesta más contundente a la crisis humanitaria. “Los palestinos sufren hambre y son masacrados a diario como parte de una campaña de castigo colectivo y limpieza étnica. Es nuestro deber actuar”, declaró en una entrevista con el diario escocés The National.
Por su parte, el Primer Ministro de Escocia, John Swinney, puso de relieve el compromiso del Gobierno escocés con la ayuda humanitaria, anunciando planes para bloquear la financiación pública a empresas que suministran armas a Israel. También se comprometió a destinar 400 000 libras esterlinas al quirófano infantil, con el fin de apoyar al ‘Centro de Preparación de Campo Gaza HOPES’ en Escocia y contribuir al establecimiento de un hospital de campaña de despliegue rápido en Gaza.
Swinney, igualmente, subrayó la urgente necesidad de actuar, al destacar que “estamos presenciando una catástrofe humanitaria de proporciones históricas. El mundo no puede esperar una sentencia judicial definitiva para actuar. Se está produciendo un genocidio, y reconocer esta realidad conlleva la responsabilidad de actuar. El pueblo de Escocia no espera menos”.
Scotland RAISES Palestinian flag over St Andrew’s House in Edinburgh
— RT (@RT_com) September 4, 2025
FREEZES public funds for defense firms linked to Israel, calling crisis in Gaza ‘PRIMA FACIE CASE of GENOCIDE’
Urges UK govt to RECOGNIZE Palestine, WITHDRAW from UK–Israel free trade & BAN Israeli imports pic.twitter.com/IjeN0C6KtP
Escocia planea proporcionar asistencia médica a 20 niños heridos en Gaza, que se espera que lleguen con sus familias en este mes en curso y donar 600 000 libras a la oficina de coordinación humanitaria de la Organización de las Nacionales Unidas (ONU) en Palestina.
El Gobierno escocés izó la bandera palestina frente a St Andrew's House en Edimburgo en un gesto simbólico de solidaridad con el pueblo palestino, en respuesta a la crisis humanitaria en la Franja de Gaza.
El genocidio israelí ha cobrado hasta ahora la vida de más de 64 231 palestinos y ha herido a 161 583, en su mayoría mujeres y niños, desde su inicio en octubre de 2023.
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