Los resultados de las elecciones generales celebradas el domingo pasado ponen de relieve la fragmentación del Parlamento entre los cuatro partidos más votados, sin haber obteniendo ninguno la mayoría absoluta, incluso el PP. Ahora todo depende de que los partidos que han accedido al Congreso decidan apoyarse o no para formar Gobierno.
El secretario del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha argumentado que sus 5,5 millones de votantes "han votado para cambiar a Rajoy", por lo que al ser preguntado por la posibilidad de una "gran coalición" entre el Partido Popular (PP) y el PSOE, ha recalcado que el hecho de que los populares hayan perdido más de cuatro millones de votos, demuestra que los españoles "han votado cambio".
Ha enfatizado que corresponde al PP intentar formar Gobierno y que habrá que esperar a ver "qué puede hacer el PP", aclarando que su partido va a respetar el mandato de los españoles, por lo que será "prudente y responsable".
Asimismo, ha rechazado comentar sobre las condiciones para un pacto fijadas el domingo por la noche por el líder de Podemos, Pablo Iglesias, entre ellas una reforma constitucional para blindar los derechos sociales, reforma electoral y posibilidad de revocación del Gobierno por los ciudadanos con el fin de llegar a un posible acuerdo con el PSOE.
Por su parte, el líder del PSOE (90 escaños), Pedro Sánchez, ha anunciado este lunes a su Ejecutiva Federal que se presentará a la reelección como secretario general de su formación en el Congreso que tendrá que convocarse en los venideros meses.
Podemos, que ha obtenido 69 escaños en el Congreso también ha declarado sus intenciones de no apoyar a la investidura de Rajoy este lunes y el líder de Ciudadanos (con 40 escaños), Albert Rivera, ha anunciado también esta jornada que está dispuesto a abstenerse y permitir un Gobierno del PP en minoría para que no sea necesario repetir las elecciones, pero como esto no bastaría para investir a Mariano Rajoy solicitó que el PSOE hiciese lo mismo.
Luena ha admitido que en Madrid su partido ha obtenido un "mal resultado”", ya que los socialistas se han posicionado cuartos, quedándose con seis escaños en la capital. Este partido ha obtenido el peor resultado de su historia en las elecciones que han estado marcadas por la esperanza de los españoles en acabar con el bipartidismo que ha reinado en el país desde hace casi 40 años.
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