El representante de la República Islámica de Irán ante la AIEA, Mohsen Naziri Asl, ha precisado en la reunión de este miércoles de la Junta de Gobernadores del organismo, que las actividades nucleares de la República Islámica, incluido el enriquecimiento de uranio a varios niveles, son completamente pacíficas, en consonancia con sus derechos en virtud del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), y están bajo la supervisión y verificación de la Agencia.
En este contexto, ha llamado a los Gobiernos europeos a “tener buenas intenciones y abstenerse de actitudes provocativas y no constructivas, asimismo, continuar trabajando en un proceso que conduzca a una solución amistosa al problema de interés común”.
El diplomático iraní ha criticado también que, si hubiera una agencia internacional para monitorear la expansión de las sanciones ilegales contra otros Estados, el informe sobre la violación de los compromisos de Occidente, según lo estipulado en la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (CSNU), sería bastante largo.
En otra parte de su discurso, Naziri Asl ha advertido que la mala situación de seguridad y protección de la planta de energía nuclear de los Emiratos Árabes Unidos (EAU) es una grave amenaza para el medio ambiente y la estabilidad de la región, y es motivo de preocupación.
La Junta de Gobernadores de la AIEA comenzó desde el lunes sus reuniones en la sede del organismo en Viena, capital de Austria.
Las autoridades de Irán han afirmado en diferentes ocasiones que todas las actividades nucleares del país se enmarcan en el derecho nuclear de Irán bajo TNP y siguen la línea de sus compromisos con el Acuerdo de Salvaguardias.
Irán denuncia que durante 20 años los países occidentales siguen acusándolo de actividades nucleares no identificadas, y al respecto, ha señalado que, si aceptó el acuerdo nuclear de 2015, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), fue para impedir este tipo de acusaciones y generar confianza.
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