Durante una reunión con varios periodistas libaneses de alto rango, Berri arremetió el jueves contra el diplomático estadounidense por hacer comentarios ofensivos sobre el Líbano. “Que nadie amenace a la nación libanesa”, subrayó el máximo legislador.
Es totalmente inaceptable, agregó, dirigirse al pueblo libanés de esta manera, especialmente por parte de diplomáticos, y en particular por parte de alguien como el embajador Tom Barrack. “Su declaración sobre la anexión del Líbano a Siria fue un grave error y completamente inaceptable”, recalcó Berri.
El enviado especial estadounidense para Siria ha generado reiteradas controversias en los últimos meses por comentarios que, en el Líbano, se perciben como una sugerencia de un retorno a Bilad al-Sham, la región histórica que una vez abarcó Siria, el Líbano, Jordania y Palestina. Altos funcionarios en Beirut han descrito las declaraciones y posturas de Barrack como una amenaza para la existencia misma del Líbano.
Durante un evento en Doha a comienzos de la semana, Barrack instó a “acercar más al Líbano y Siria, alinear estas dos civilizaciones antiguas y hermosas”. Esto luego de que en julio había dicho que “si el Líbano no avanza, volverá a Bilad al-Sham”, lo que saltó las alarmas en Beirut.
En su intervención en el foro de Doha, el diplomático estadounidense elogió además al nuevo régimen sirio, dirigido por Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que asumió el poder por la fuerza en diciembre de 2024 en medio de intensos ataques aéreos israelíes contra las infraestructuras civiles y defensivas del país.
Barrack afirmó que el régimen sirio, dirigido por el excomandante de Daesh y Al-Qaeda, Abu Mohammad al-Golani, había alcanzado logros “épicos” y “heroicos” desde el derrocamiento del anterior gobierno sirio, presidido por Bashar al-Asad, por lo que llamó a la comunidad internacional a permitir que Siria desarrollara su propio sistema de gobierno.
Observadores han criticado las declaraciones de Barrack como una forma de eludir el sólido y sostenido apoyo militar y de inteligencia de Occidente al régimen israelí, que históricamente ha permitido la agresión regional de Tel Aviv, incluyendo las feroces incursiones israelíes que ayudaron a HTS a derrocar al gobierno de Al-Asad.
El Líbano ha implementado el 90 % de la tregua pese al incumplimiento israelí
En otra parte de sus declaraciones, Berri también afirmó que el Ejército libanés había implementado el 90 % del acuerdo de cese de hostilidades en la zona del sur del Río Litani y que finalizará por completo lo que resta para finales del año.
Israel y el movimiento de Resistencia libanés (Hezbolá) alcanzaron un acuerdo de alto el fuego, que entró en vigor el 27 de noviembre de 2024. Tel Aviv estaba obligada, en virtud del acuerdo, a retirarse completamente del territorio libanés. Sin embargo, ha mantenido presencia militar en cinco lugares, violando abiertamente tanto la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU como las disposiciones de la tregua.
Desde la implementación del alto el fuego, Israel ha incumplido repetidamente el acuerdo con continuos ataques contra el territorio libanés que han dejado más de un centenar de muertos.
Las autoridades libanesas han advertido que las violaciones del alto el fuego por parte del régimen israelí representan un riesgo para la estabilidad del país.
Altos funcionarios de Hezbolá también han subrayado que la unidad nacional del Líbano y la preservación de las armas de la Resistencia son cruciales para contrarrestar la “amenaza existencial” que representan Israel y Estados Unidos.
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