• Nasralá: enemigo israelí pagará con sangre el asesinato a civiles
Publicada: viernes, 16 de febrero de 2024 14:08
Actualizada: sábado, 17 de febrero de 2024 11:47

El líder de Hezbolá advierte a Israel que el precio de la sangre de civiles será sangre, a la vez que destaca capacidades misilísticas del movimiento libanés.

“El precio de la sangre de civiles será sangre, no sitios, vehículos y dispositivos de espionaje israelíes”, ha advertido este viernes el secretario general del Movimiento de Resistencia Islámica de El Líbano (Hezbolá), Seyed Hasan Nasralá, en un discurso en conmemoración del aniversario de los dirigentes mártires de la Resistencia.

Según el alto responsable del movimiento libanés, “el objetivo del enemigo israelí al matar a civiles es presionar a la Resistencia para que se detenga, porque todas las presiones desde el 7 de octubre tenían como objetivo detener el frente sur”.

De igual manera, ha enfatizado que la Resistencia no puede tolerar la cuestión de dañar a los civiles, y el enemigo debe entender que se ha excedido.

 

Nasralá ha rcalcado que la respuesta a la masacre “debe ser continuar e intensificar el trabajo en el frente”, subrayando que atacar el asentamiento de Kiryat Shemona con decenas de cohetes Katyusha y varios misiles “Al-Falaq”, “es una respuesta preliminar” a lo ocurrido en Nabatieh y Souwaneh.

En el contexto de su respuesta al ministro de asuntos militares del régimen israelí, Yoav Gallant, que recientemente amenazó con llegar a Beirut, Nasralá ha reiterado una posición anterior, recordando a Gallant y a los líderes enemigos que “la Resistencia en el Líbano posee capacidades misilísticas enormes y precisas que se extienden desde Kiryat Shemona hasta Eilat”.

En este contexto, ha subrayado que la Resistencia “está en el corazón de una batalla real en un frente que se extiende más de 100 kilómetros”, y el ascenso de los mártires de la Resistencia es “parte de la batalla en curso”.

Asimismo, ha precisado que los sacrificios de los movimientos de la Resistencia “no parten de un estado emocional o de una reacción temporal, sino de la conciencia, la intuición y el conocimiento de los objetivos”.

En el mismo contexto, nasralá ha agradecido a las Fuerzas Armadas yemeníes y al movimiento popular yemení Ansarolá, que han continuado, hasta hoy, atacando a los barcos estadounidenses y británicos, a pesar de la agresión estadounidense y británica contra ellos.

“La principal batalla sigue siendo la que está sucediendo en Gaza”, ha comentado diciendo que Argelia proporcionó más de uno o dos millones de mártires. “Si no hubiera proporcionado todos estos mártires, ¿habría sido liberada Argelia?”, ha preguntado.

El costo de la rendición es grande y peligroso

Hablando del coste de la Resistencia, su precio, sus consecuencias y los sacrificios resultantes de ella, que es “un tema que ha estado sobre la mesa desde 1984”, Nasralá ha resaltado que “el coste de la rendición es grande, peligroso, exorbitante y muy fatídico”.

En esta misma línea, al precisar que “la rendición significa sumisión, humillación, esclavitud y desprecio por nuestros mayores, nuestros hijos, nuestro honor y nuestro dinero”, ha agregado que “el precio de la rendición en El Líbano significó la hegemonía política y económica israelí sobre nuestro país”.

 

Además, Nasralá ha declarado que si el pueblo palestino se hubiera rendido, “hoy el pueblo de Gaza estaría fuera de ella, el pueblo de Cisjordania estaría fuera de ella, e incluso la gente de las tierras de 1948 fuera de ella”.

De igual modo, ha explicado que “entre las responsabilidades que recae sobre nosotros, y sobre los hombros de los pueblos islámicos y de los pueblos libres del mundo, está la de esclarecer los hechos”.

Respecto a la crítica situación humanitaria que hoy vive el pueblod de Gaza, Nasralá ha cuestionado que “¿No es humillación y debilidad que los países que controlan a dos mil millones de musulmanes no puedan llevar medicinas y alimentos al pueblo de Gaza?”.

La Resistencia palestina fue objeto de insultos más horrendos

Respecto a las mentiras y rumores que han afectado a la Resistencia palestina desde el 7 de octubre, Nasralá ha confirmado que muchos creyeron en la falsificación histórica israelí y desde la operación Tormenta de Al-Aqsa hasta hoy, la resistencia palestina ha sido sometida al más horrendo proceso de insulto.

El alto responsable de Hezbolá ha apostillado que la Resistencia hizo que el enemigo viviera en una crisis existencial, cuyo clímax fue la operación Tormenta de Al-Aqsa, y ha enfatizado que el régimen de Israel no pudo proporcionar al mundo una sola prueba de las mentiras que ha estado promoviendo desde el 7 de octubre.

Si se abre una investigación sobre el 7 de octubre, la base moral y legal que (el primer ministro israelí, Benjamín) Netanyahu y (el presidente de EE.UU., Joe) Biden alegan para insistir en destruir a HAMAS (Movimiento de Resistencia Islámica Palestina) colapsará”, ha remarcado Nasralá.

El mayor fenómeno de hipocresía que el mundo está presenciando hoy es la posición de la administración estadounidense ante lo que está sucediendo en Gaza, ha anotado.

En este mismo ámbito, Nasralá ha enfatizado que si Estados Unidos deja de armar y apoyar a Israel ahora, la agresión cesará inmediatamente, le guste o no a Netanyahu.

“Quien insiste en el objetivo de eliminar a HAMAS es Estados Unidos más que Israel”, ha impugnado.

De acuerdo con el líder de hezbolá, la administración estadounidense es responsable de cada gota de sangre en la región, y los funcionarios israelíes son herramientas de implementación.

El objetivo israelí es desplazar a los palestinos

Nasralá ha aclarado que lo que la “Tormenta de Al-Aqsa” reveló fue que el objetivo israelí en el que estaba trabajando era desplazar a los palestinos y establecer un Estado puramente judío.

“El asedio a la Franja de Gaza tenía como objetivo llevar a Gaza a la muerte en paz y tranquilidad, sin sacudir al mundo”, ha dicho.

También, ha alertado que “el objetivo israelí es desplazar al pueblo de Cisjordania a Jordania, al pueblo de Gaza a Egipto y al pueblo de la década de 1948 al Líbano”.

Hezbolá no interfiere en negociaciones entre palestinos e israelíes

En cuanto a las negociaciones políticas entre las facciones de la Resistencia palestina y el enemigo israelí, Nasralá ha aseverado que “nosotros no interferimos en lo que sucede en las negociaciones”.

Asimismo, ha afirmado que los hermanos de HAMAS y la Resistencia palestina representan los frentes del Eje de la Resistencia y todas sus bases de apoyo militar y logístico.

Eje de Resistencia busca infligir mayores pérdidas al enemigo

También en su discurso, el alto responsable de Hezbolá ha confirmado que la Resistencia en El Líbano y Palestina “rompió el equilibrio de la disuasión israelí, destrozó su imagen y creó un equilibrio de disuasión y protección”.

Asimismo, ha agregado que “No importa lo que digamos o expliquemos, nuestras lenguas no podrán describir la legendaria resistencia en Gaza y la legendaria firmeza del pueblo de Gaza”.

El líder de Hezbolá ha afirmado que los israelíes y los estadounidenses no esperaban que la Resistencia en el Líbano tuviera la voluntad y el coraje de abrir el frente para apoyar a Gaza.

En respuesta a preguntas sobre el objetivo del Eje de Resistencia, Nasralá ha asegurado que el objetivo de todos nosotros en el Eje de la Resistencia —Estados, pueblos, movimientos y combatientes— era y seguirá siendo que en esta batalla hay que derrotar al enemigo.

Lo que significa la derrota del enemigo en esta batalla es su fracaso en lograr sus objetivos, ha resaltado el alto responsable del movimiento libanés.

Nuestro objetivo en el Eje de la Resistencia es infligir las mayores pérdidas al enemigo en esta batalla para obligarlo a derrotar y retirarse, ha apuntado.

El arma de la resistencia para proteger al Líbano

En cuanto a Hezbolá, ha señalado que el arma de este movimiento de la Resistencia no es cambiar el sistema político, la constitución y el sistema de gobierno ni aplicar nuevas cuotas sectarias en el Líbano. “El arma de la Resistencia es proteger al Líbano”, ha recalcado.

Las fronteras terrestres han sido demarcadas y cualquier negociación, ha proseguido, se basará en “Salir de nuestra tierra libanesa”.

Nasralá ha destacado que la cultura de nuestra Resistencia es una cultura de vida y dignidad, no una cultura de humillación y rendición.

hnb