“Rara vez se ve este tipo de cooperación entre países. Austria fue en el pasado un país fuerte, pero a Irán todavía se le puede considerar como uno de los poderes superiores de la región”, ha subrayado este miércoles Stefan Scholz, en un encuentro con el director de la Media Luna Roja de Irán, Karim Hemati.
Tras haber resaltado el conocimiento actualizado de los socorristas iraníes, el diplomático austríaco ha invitado a Irán a participar en el ejercicio de equipos internacionales de rescate y primeros auxilios de países europeos.
A su juicio, la presencia de los iraníes en los equipos internacionales de rescate conlleva dos ejes importantes; en primer lugar, Irán puede demostrar su gran experiencia para ofrecer ayuda en sucesos internacionales y, segundo, la presencia del equipo iraní en casos internacionales puede destacar a Irán como uno de los principales países en el campo de los primeros auxilios en el entorno internacional, lo que, a su vez, puede mostrar el alto poder y la capacidad de la Media Luna Roja de Irán, ha explicado Scholz.
Entretanto, Hemati ha elogiado las cooperaciones Teherán-Viena y ha expresado su confianza en que la Sociedad de la Cruz Roja de Austria pueda ayudar a Irán en la contención de la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, en medio de las sanciones inhumanas e injustas de Estados Unidos.
“Esperamos que Austria apoye más que antes al pueblo iraní, que actualmente está bajo presión de las sanciones de los Estados Unidos”, ha apostilladlo.
El presidente de EE.UU., Donald Trump, tras retirar unilateralmente en mayo de 2018 a su país del Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), nombre oficial del acuerdo nuclear firmado en 2015 entre Teherán y el Grupo 5+1 —conformado entonces por EE.UU., el Reino Unido, Francia, Rusia y China, más Alemania— intensificó su campaña de presión económica contra la República Islámica imponiendo varias rondas de sanciones, que han afectado directamente a la población civil del país persa.
Las autoridades iraníes califican de “crímenes de lesa humanidad” los embargos de Estados Unidos, pues afectan al suministro de medicamentos y otras áreas del sector de la salud del país persa para hacer frente a la emergencia sanitaria por la COVID-19.
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