En alusión a los actos vandálicos de un grupo reducido de alborotadores, apoyados por EE.UU. y sus aliados, durante los recientes disturbios en Irán, el comandante en jefe del Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán, el general de división Hosein Salami, ha indicado de forma irónica que todo el poder de Estados Unidos es prender fuego a unos basureros en las calles de Irán.
El comandante iraní ha considerado que los recientes acontecimientos en Irán fue una gran sedición global, condenando el papel de Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y Arabia Saudí en este complot.
“Esta sedición está pasando sus últimos momentos. Esta sedición es un bebé nacido muerto y marcará una historia vergonzosa para Estados Unidos”, ha resaltado en una reunión en la ciudad santa de Qom (centro).
Salami ha exigido a EE.UU. y sus aliados británicos y saudíes dejar de “entrometerse en los asuntos internos de Irán” y de “difundir mentiras y conspirar” contra el país, advirtiendo a estos países que “cualquier movimiento que hagan contra la nación iraní, recibirá una respuesta cuantas veces más dura”.
En otra parte de sus declaraciones, se ha referido a las razones detrás de estos movimientos antiraníes asegurando que el enemigo tiene como objetivo “detener el progreso de Irán, por eso intentaron interrumpir las actividades de las universidades y esto significa detener el desarrollo científico del país”.
“El plan de Estados Unidos es cerrar nuestras universidades y escuelas y sabe que la ciencia y el conocimiento han crecido en estos lugares y que Irán está logrando grandes logros”, ha expresado.
Hablando sobre algunos logros militares y civiles, como la fabricación de drones y el envío de satélites al espacio, ha señalado que la arrogancia global (grandes potencias occidentales) empleó toda su guerra blanda y psicológica para derrocar al sistema islámico de Irán y hacer que la gran nación iraní cediera a las presiones mientras ha enfatizado que su deseo nunca se hará realidad.
Irán ha confinado a EEUU en sus bases
“Aunque Estados Unidos pudo derrocar a Sadam [el régimen de Sadam Husein en Irak] con un ataque militar, la Revolución [Islámica de Irán] y el Islam pudieron tomar rápidamente la iniciativa de Estados Unidos y arrinconarlo y confinarlo en sus propios cuarteles”, ha agregado el comandante del CGRI.
Salami ha denunciado además que el enemigo trató de engañar a la juventud iraní y ponerlos en contra del gobierno respaldando los disturbios, pero pronto se dieron cuenta de que la juventud no puede ser engañada por ellos.
El general iraní ha concluido que la nación iraní asestará un duro golpe al enemigo y frustrará su guerra psicológica que se ha dirigido contra sus creencias islámicas, como lo han hecho hasta ahora.
Últimamente, alborotadores, aprovechándose de la muerte de la joven iraní Mahsa Amini —el 16 de septiembre en un hospital de Teherán, tras su detención policial— han provocado disturbios y atacado a las fuerzas de seguridad y causado destrozos parciales y totales en propiedades públicas y privadas.
Los responsables iraníes ven las huellas de Estados Unidos, Israel y varios Estados europeos en los recientes actos vandálicos y aseguran que actuarán con firmeza ante los que vulneran la seguridad de Irán.
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