Ali Akbar Safavi, comandante de la Fuerza de Resistencia Popular de Irán (Basich) en la región de Nikshahr, en la provincia de Sistán y Baluchistán (sureste), informó que dos miembros de esta unidad voluntaria habían perdido la vida en un intercambio de disparos con terroristas en las afueras de la aldea de Hichan, el viernes por la noche.
Los mártires caídos en el enfrentamiento se tratan del comandante de la base de Hichan, Jodabajsh Qarib, y Muslim Darzadeh, uno de sus miembros.
El suceso se produjo casi una semana después de que el Cuerpo de Guardianes de la Revolución Islámica (CGRI) de Irán notificara que habían desmantelado una banda armada en esta provincia fronteriza con Paquistán, tras matar a dos elementos terroristas y arrestar a un tercero.
Las fuerzas de seguridad de Irán han desarticulado en los últimos años a cientos de grupos terroristas que, con el apoyo de algunos países, entre ellos EE.UU. y Arabia Saudí, buscaban poner en peligro la seguridad territorial del país.
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