“Continuamos trabajando en el marco del servicio postventa del equipamiento anteriormente suministrado; es algo que no está prohibido”, comunicó el jueves Alexander Mikheev, director general de la entidad exportadora de armas rusa Rosoboronexport.
Mikheev mencionó el estado de las sanciones a Irán y aseguró que todos los intercambios Moscú-Teherán se desarrollan en el marco del Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, por sus siglas en inglés).
Según dio a conocer el máximo titular de la referida entidad (principal agencia estatal intermediaria rusa para la exportación-importación de productos relacionados con la defensa), las partes están desarrollando consultas bilaterales en el sector defensivo.
“Estamos intercambiando delegaciones. Ellos (los iraníes) nos invitan constantemente a sus conferencias y exposiciones industriales”, añadió Mikheev, para luego resaltar la mutua cooperación en la esfera de los servicios postventa.
Continuamos trabajando en el marco del servicio postventa del equipamiento anteriormente suministrado; es algo que no está prohibido”, destaca Alexander Mikheev, director general de la entidad exportadora de armas rusa Rosoboronexport.
En los últimos años, Teherán y Moscú han estrechado sus lazos bilaterales en todos los ámbitos —político, diplomático, defensivo, económico, comercial y cultural, entre otros—.
En lo referente al sector militar, Rusia ha entregado al país persa sistemas antiaéreos S-300, principalmente destinados a defender las instalaciones nucleares iraníes, y negocia también el suministro de armamento y equipos militares de fabricación propia por valor de 10.000 millones de dólares.
Este acercamiento Irán-Rusia ha disgustado a varios países, especialmente de la región de Oriente Medio, y sus intercambios militares tienen inquietos a EE.UU. y al régimen de Israel.
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