Un panel de expertos del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) en su informe anual, publicado el viernes, dijo que, durante el año pasado, Pyongyang continuó avanzando en el ámbito nuclear a pesar del cierre de sus fronteras debido a la pandemia del nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, lo que llevó a “niveles históricamente bajos” de bienes y personas que ingresan o salen del país.
“Durante el período sobre el que se informa, la República Popular Democrática de Corea [el nombre formal de Corea del Norte] siguió manteniendo y desarrollando sus programas nucleares y de misiles balísticos en violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad”, se lee en el texto.
Según el reporte, aunque no se informaron pruebas nucleares ni lanzamientos de misiles balísticos intercontinentales, Pyongyang “continuó desarrollando su capacidad para producir materiales fisionables nucleares”.
El informe anual sobre la aplicación de sanciones de Corea del Norte cubre el período comprendido entre el 4 de agosto de 2021 y el 28 de enero de 2022.
Pyongyang sigue reforzando sus capacidades militares, asegurando que estas actividades tienen carácter de autodefensa ante las maniobras de su “mayor enemigo”, es decir, Estados Unidos, y su aliado cercano, Seúl.
En este mismo contexto, el líder norcoreano, Kim Jong-un, aseguró el pasado lunes que su país continuará el desarrollo de sus “formidables” capacidades de ataque para garantizar su seguridad ante amenazas imperialistas.
Ante tal coyuntura, desde Estados Unidos alertan de que Corea del Norte estaría realizando los preparativos para llevar a cabo un ensayo nuclear subterráneo.
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