Colombia es un país que reconoce la diversidad religiosa, y sus miembros se reunieron para celebrar esta condición, así como para hacer votos por la paz y condenar el genocidio que el sionismo israelí comete contra el pueblo palestino.
El escenario también sirvió para rechazar enérgicamente la ofensiva bélica del régimen israelí contra Irán, así como la indiferencia de los países europeos y Estados Unidos ante la falta de acciones de justicia contra Netanyahu.
Las comunidades religiosas anunciaron que seguirán realizando este tipo de encuentros en el país mientras persista la agresión del régimen de Israel contra la autodeterminación de pueblos como Palestina e Irán.
Álvaro Altamiranda, Bogotá
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