El Senado norteamericano aprobó el martes la Ley de Innovación y Competencia de EE.UU. de 2021 y de este modo, dio luz verde a destinar unos 250 000 millones de dólares a las empresas locales para competir con la tecnología de China.
A través de un comunicado emitido este miércoles, el comité de asuntos exteriores de la Asamblea Popular Nacional (APN) de China ha denunciado que tal medida muestra la “mentalidad de guerra fría” de Estados Unidos.
La nota también reza que, de hecho, con la citada legislación, EE.UU. difama las políticas internas y externas de Pekín e interfiere en sus asuntos internos so pretexto de defender los derechos humanos y la libertad religiosa.
Es más, prosigue, intenta exagerar la llamada “amenaza de China” contra la hegemonía global del Gobierno estadounidense, presidido por el demócrata Joe Biden.
El proyecto de ley necesita la aprobación de la Cámara de Representantes para luego ser firmado como ley por Biden, a cuya Administración advirtió China en enero de que no politice la tecnología, ya que los logros científicos y tecnológicos deberían beneficiar a toda la humanidad.
La advertencia de Pekín se produjo luego de que el mandatario de EE.UU. anunciara que quiere asegurarse de que la tecnología norteamericana no facilite el desarrollo militar chino.
Aunque en su campaña parecía tener decisión de dar un giro a las políticas antichinas de su predecesor, Donald Trump, hasta el momento las relaciones Washington-Pekín se han deteriorado en gran medida en la era Biden.
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