Mark Toner, portavoz del departamento de EE.UU., alertó a Ruanda de que su país revisaría las relaciones bilaterales, pero no amenazó con cortar la ayuda que entrega al estado africano.
Asimismo manifestó su esperanza de que Kagame abandone el poder a finales de 2017, respetando sus compromisos de favorecer una nueva generación de líderes en su país.
Kagame gobierna Ruanda desde 1994, cuando se produjo la masacre de ruandeses de la etnia tutsi.
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