El frente de enemigos “trata de destruir sociedades y derramar la sangre de la Umma (comunidad) islámica iniciando guerras y derramamiento de sangre, creando y equipando corrientes arrogantes y grupos takfiríes, y de esta manera, utiliza todo su poder para confiar en la ciencia y la tecnología y el uso de poder militar y mediático para lograr sus objetivos”, ha repudiado el mandatario iraní en una ceremonia celebrada este lunes en honor a los activistas de las mezquitas en la ciudad de Qom.
El presidente ha puesto de manifiesto que “aquellos que creen en el sistema de dominación, se dieron cuenta de que el único movimiento que les puede impedir lograr sus objetivos es el movimiento que cree en la religión y los valores divinos, y por lo tanto, la solución es sembrar la discordia entre ellos”.
En este sentido, el jefe del Gobierno iraní ha subrayado que preocupar las mentes y convertir las esperanzas en decepción, además de profanar las santidades de los musulmanes, especialmente el Sagrado Corán, son algunas medidas de las potencias arrogantes contra el frente de la verdad.
“Estos son los eslabones de una cadena para hacer frente a los que creen en Dios y en la resurrección y han elegido las mezquitas como su baluarte”, ha recalcado.
Al referirse a la frase “el enemigo quiso y no pudo y nosotros quisimos y pudimos”, enfatizada por el Líder de la Revolución islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, el presidente Raisi ha avisado que hoy, el enemigo persigue una guerra combinada en los ámbitos económicos, cultura es y mediáticos y trata de influir en la percepción de la gente y desalentar los corazones esperanzados y hacer reinar la desesperación en la sociedad.
Sin embargo, ha puesto de relieve que el frente de la Revolución Islámica, tal como ha obtenido muchas victorias en campos como la guerra híbrida y la lucha contra los enemigos, definitivamente avanzarán en la economía de resistencia, y en este campo, la nación iraní y el frente de la Resistencia saldrán victoriosos.
hnb
