El presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el miércoles que su país reconoce Al-Quds (Jerusalén) como la capital del régimen israelí y ordenó que la embajada de Estados Unidos se traslade de Tel Aviv (oeste de la Palestina ocupada) a la urbe usurpada por Israel.
En reacción, Ali Akbar Velayati, asesor del Líder de la Revolución Islámica de Irán para Asuntos Internacionales, ha señalado este jueves que “esta medida poco sabia de una persona inestable y desinformada sobre asuntos políticos e históricos ignora el derecho legítimo y definido de la oprimida nación palestina y viola flagrantemente las resoluciones internacionales”.
Además de condenar la iniciativa de la Casa Blanca para dar legitimidad a Israel sin tierra, Velayati ha enfatizado que esta decisión forma parte de los intentos de los enemigos para “desestabilizar” el suroeste de Asia, “debilitar” el mundo musulmán y arriesgar la paz y estabilidad en la región.
De igual modo, el político iraní ha considerado la medida como nueva “mancha de deshonra” sobre las políticas de Washington a la hora de apoyar la violencia y la represión, para favorecer al régimen de Tel Aviv, además de desencadenar “guerras subsidiarias” en la región.
Esta medida poco sabia de una persona inestable y desinformada sobre los asuntos políticos e históricos ignora el derecho legítimo y definido de la oprimida nación palestina y viola flagrantemente las resoluciones internacionales”, ha señalado Ali Akbar Velayati, asesor del Líder de la Revolución Islámica de Irán para Asuntos Internacionales.
El también director del Centro de Estudios Estratégicos del Consejo de Discernimiento del Sistema de la República Islámica de Irán, ha cargado asimismo contra la política de doble moral del magnate republicano, que por un lado, da sermones sobre el compromiso de Estados Unidos con la paz y por otro, anuncia Al-Quds como capital del régimen infanticidio de Israel.
Además de advertir de que EE.UU. y el régimen de Israel son responsables de las próximas consecuencias de nueva muestra de la enemistad contra los musulmanes, Velayati ha recalcado que Trump debe reconocer que la ciudad santa de Al-Quds permanecerá la primera Quibla (punto hacia donde se reza) de los musulmanes del mundo y que pertenecerá para siempre a los palestinos.
La medida estadounidense tampoco ha logrado conseguir la luz verde de los aliados más cercanos, incluido el Reino Unido. Tanto los países árabes y musulmanes como los del otro lado del mundo han criticado la medida y advierten de las consecuencias negativas de la misma.
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