Miles de bomberos franceses salieron el martes a las calles para protestar por la falta de medios, a causa de la polémica reforma de pensiones, y para reclamar el aumento de salarios.
En un intento por reprimir la manifestación, los agentes policiales recurrieron al uso de gases lacrimógenos y porras contra los bomberos congregados.
Un año después del estallido del movimiento de los “chalecos amarillos”, diversos colectivos, encabezados por sindicatos del sector de transporte, incluidos el ferroviario, el metro, autobúses y aéreo, celebran protestas desde finales de 2019 contra la reforma de pensiones que el Ejecutivo de Emmanuel Macron quiere aprobar.
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