• El defensor del pueblo de Venezuela, Tarek Williams Saab.
Publicada: jueves, 23 de julio de 2015 2:10
Actualizada: martes, 13 de septiembre de 2016 4:54

El defensor del pueblo venezolano, Tarek William Saab, ha tachado de injerencista la visita de un grupo de senadores españoles al país para reunirse con dirigentes de la ultraderecha presos.

Sobre este tipo de injerencia he dicho y he repetido que el artículo 40 de nuestra Constitución privilegia y habilita los derechos políticos para ciudadanos venezolanos, no para ciudadanos extranjeros sean estos expresidentes o legisladores”, ha precisado este miércoles Saab en declaraciones ante medios locales.

Sobre este tipo de injerencia he dicho y he repetido que el artículo 40 de nuestra Constitución privilegia y habilita los derechos políticos para ciudadanos venezolanos, no para ciudadanos extranjeros sean estos expresidentes o legisladores”, precisa Saab.

Refiriéndose al alegato de los senadores invitados por la ultraderecha, de una solicitud de audiencia enviada a la Defensoría del Pueblo para acreditar su visita, ha asegurado que su despacho no ha recibido “ningún tipo de solicitud” de audiencia “de ninguna cámara legislativa de ningún país extranjero”.

 Al recordar las anteriores visitas al país suramericano del expresidente español Felipe González y del exmandatario colombiano Andrés Pastrana, también para mantener reuniones con la rama opositora, Saab consideró que "pasada la oleada", ahora "tenemos la de legisladores". 

De igual manera ha detallado que esta visita de senadores españoles y latinoamericanos a Caracas, que se extenderá hasta el próximo viernes, forma parte de una “campaña de descrédito en contra del Estado venezolano”.

Aquí, denuncia Saab, pareciera que cualquiera cree que esto es un potrero, que puede llegar por el aeropuerto, convocar a los medios de prensa, humillar, denigrar al hombre y la mujer venezolana y retirarse como parte de un turismo en contra del país.

Este miércoles un grupo de senadores españoles incluido, Dionisio García, del gobernante Partido Popular (PP); Iñaki Anasagasti, del Partido Nacionalista Vasco (PNV), y José Miguel Camacho y Andrés Gil García, por el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), arribaron a Caracas, capital venezolana, para entrevistarse con los dirigentes opositores encarcelados, en particular Leopoldo López, detenido por su supuesta responsabilidad en las protestas violentas de 2014.

El pasado 18 de junio, varios senadores brasileños viajaron a Venezuela para reunirse con líderes de la oposición venezolana. 

El Gobierno venezolano considera a estos actos y viajes como una injerencia en los asuntos internos del país suramericano, además de una afrenta a la justicia.

La reacción de las autoridades venezolanas viene dada por una serie de complots derechistas a los cuales se ha enfrentado el Gobierno del presidente Nicolás Maduro a lo largo de su mandato.

En este contexto, entre febrero y mayo del año pasado, Caracas fue escenario de violentas manifestaciones incitadas por la derecha con respaldo extranjero, en particular de EE.UU., encaminadas a propiciar un golpe de Estado.

En reiteradas ocasiones, el Gobierno venezolano ha advertido sobre las acciones de la extrema derecha, que con el apoyo de Occidente, intenta desestabilizar el país.

mpv/ncl/rba