Los venezolanos han salido a las calles de Caracas, la capital, para defender el Programa de Recuperación Económica, una iniciativa de Maduro para poner fin a la crisis económica que vive el país.
Desde una concentración en la sede de la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (CANTV) situada en la avenida Libertador, se ha iniciado una marcha hacia el Palacio de Miraflores, sede presidencial.
Algunos de los participantes de la movilización han precisado que apoyan todas las medidas adoptadas por el jefe de Estado. Otros, han pedido defender los precios justos acordados, para que el programa tenga verdaderamente un impacto positivo.
“El pueblo está en la calle para apoyar todas las medidas que el presidente ha tomado. Sin embargo, pedimos que los funcionarios de la Sundde (Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos) sean duros, ya que a veces no fiscalizan de la manera indicada. Por eso aquí estamos nosotros respaldando para responder ante los especuladores”, ha dicho uno de los asistentes a la marcha.
Los organizadores de la convocatoria han anunciado que se mantendrán en la calle defendiendo las medidas dictadas por el Ejecutivo y harán frente a las mafias económicas que pretendan distorsionar la esperanza que está surgiendo con el nuevo modelo económico.
El pueblo está en la calle para apoyar todas las medidas que el presidente ha tomado (...)”, manifiesta uno de los asistentes a la marcha en defensa del Plan de Recuperación Económica impulsado por el presidente venezolano, Nicolás Maduro.
El lunes 20 de agosto entró en vigencia y con total normalidad el nuevo cono monetario, el bolívar soberano (Bs.S), tras la reconversión monetaria que eliminó cinco ceros al anterior bolívar y que está anclado al valor de la criptomoneda venezolana, el Petro, respaldada a su vez por la riqueza energética y mineral del país suramericano.
Esa jornada, Maduro aseguró que el nuevo plan económico acabará con la imposición de un dólar paralelo y se podrá hacer frente a la “guerra económica” que ha sido inducida por EE.UU.
Denunció, por otra parte, que los sectores productivos del país se han aliado para incrementar el costo de la vida y generar malestar en la población, como parte de un manual de ataque no convencional del Gobierno de Washington para desestabilizar a la nación bolivariana.
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