El sitio hebreo Ynet informó el jueves que 17 jóvenes drusos de la ciudad de As-Suwayda, en los altos del Golán sirios, recibirán formación intensiva y especializada en Israel, obtendrán certificaciones y regresarán a su tierra natal con conocimientos, equipo y un nuevo camión de bomberos, “con el objetivo de salvar vidas” y establecer una estación de bomberos en la región drusa.
Según el informe, esta es la primera vez que el régimen israelí organiza un programa de este tipo para jóvenes sirios dentro de los territorios palestinos ocupados.
La iniciativa es liderada por el ministro israelí de seguridad interna, el extremista, Itamar Ben-Gvir, en coordinación con el consejo de seguridad nacional del régimen, y se prevé que sea parte del plan integral de inversión en la sociedad drusa.
En reacción, el gobierno interino sirio ha enfatizado que garantiza la igualdad de derechos para todas las tribus, incluyendo a los drusos, y considera que las declaraciones del régimen israelí sobre su apoyo a esta comunidad son simplemente un pretexto para interferir en los asuntos internos de Siria.
Según observadores internacionales, dadas las repetidas agresiones israelíes contra territorio sirio, esta acción no puede contemplarse como un programa puramente humanitario, sino que Israel busca ejercer una influencia sutil en la comunidad drusa siria, consolidando la ocupación de los altos del Golán y explotando políticamente la crisis interna de Siria.
Tal como indican los expertos, el entrenamiento de jóvenes drusos por Israel forma parte de la estrategia del régimen para cambiar el equilibrio de poder en el sur de Siria y crear una base social entre las minorías.
El régimen israelí ocupa los altos del Golán sirios desde 1967 y ha ampliado su ocupación desde la caída del gobierno de Bashar al-Asad a finales de 2024.
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