EE.UU. ha impuesto este miércoles nuevas sanciones al presidente sirio, Bashar al-Asad, y a su esposa, Asma, así como a miembros del Gobierno, el Ejército y varias otras figuras, y anunciado el inicio de una “campaña sostenida de presión” contra Siria.
“Las medidas de EE.UU. contra el país, en el marco de la llamada Ley César, desvelan la violación, por parte de la Administración estadounidense, de todas las leyes y normas internacionales”, ha reaccionado una fuente oficial de la Cancillería siria, que habló bajo condición de anonimato.
En un comunicado recogido esta misma jornada por la agencia oficial siria de noticias, SANA, la fuente ha subrayado que el Gobierno estadounidense, que “asesina a sangre fría” a sus ciudadanos y practica las formas “más atroces” de discriminación racial, es el último país que tiene derecho a hablar sobre los derechos humanos.
El funcionario sirio se ha referido, de este modo, a la dura represión, protagonizada por el Gobierno estadounidense, de las protestas antirracistas. Muchas grabaciones muestran violentas reacciones, golpes, patadas y el lanzamiento de gases lacrimógenos por la Policía contra los manifestantes, miles de los cuales han sido arrestados y otros han muerto.
Tras recordar que muchos países del mundo han condenado las sanciones unilaterales e ilegítimas de Washington contra Damasco y han pedido su levantamiento inmediato, la fuente de la Cancillería siria ha insistido en que tales embargos constituyen un crimen de lesa humanidad y una violación flagrante del derecho internacional.
Entretanto, ha subrayado, el pueblo y el Ejército sirios harán frente a las sanciones de EE.UU., y defenderán la soberanía y la integridad territorial de su país, tal y como ya han derrotado a los grupos terroristas, “instrumentos” de Washington.
Nadie se dejará engañar por las afirmaciones del presidente de EE.UU., Donald Trump, y su Administración sobre el apoyo a los sirios, pues ya se han desvelado sus complots, al igual que sus políticas, que siembran muerte, destrucción e inestabilidad, para servir a los intereses del régimen de Israel en la región, ha agregado.
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