• La ansiedad es una emoción muy común y no necesariamente perjudicial.
Publicada: viernes, 16 de agosto de 2019 7:29
Actualizada: sábado, 17 de agosto de 2019 5:03

La ansiedad es una emoción muy común y no necesariamente perjudicial que puede experimentar cualquier persona ante un evento importante.

Ahora bien, la ansiedad también puede manifestarse de una manera más severa: en forma de ataques que pueden alarmar al que los sufre y, también, a la persona que los presencia. Lo primero que hay que tener claro cuando se habla de ansiedad es que no siempre es nociva.

Sin embargo, en determinados casos, la ansiedad sí es negativa para las personas. “Sucede cuando la ansiedad es irracional y está presente en nuestra vida de forma generalizada, frecuente, duradera y es más intensa de lo que cabría esperar”, dijo el jueves la secretaria de la Sociedad Española para el avance de la Psicología Clínica y de la Salud. Siglo XX (SEPCyS), Noelia Morán, al portal Infosalus.

De hecho, la variante dañina de la ansiedad y la que no ayuda al que la sufre está presente en situaciones “en las que no hay ninguna amenaza o peligro”, afirmó la experta para luego agregar que este tipo genera “un importante sufrimiento personal (…) lo que impide que lleven una vida normal”.

Podemos acercarnos a la persona y, hablándole con un tono de voz tranquilo utilizando frases cortas y simples, será necesario explicarle que está teniendo un ataque de pánico”, dijo la secretaria de la Sociedad Española para el avance de la Psicología Clínica y de la Salud. Siglo XX (SEPCyS), Noelia Morán.

 

Cuando aparece la crisis de angustia o el ataque de pánico, lo primero que hay que hacer es, sobre todo, controlar la hiperventilación que es “una de las claves” de este tipo de ansiedad. Los trucos más conocidos son utilizar “una bolsa o el hueco de las manos con el fin de estabilizar la respiración y, por ende, la ansiedad”, asegura la experta. También añade que resulta imprescindible “ayudarle a desacelerar la respiración respirando con él o ella”. 

“Podemos acercarnos a la persona y, hablándole con un tono de voz tranquilo utilizando frases cortas y simples, será necesario explicarle que está teniendo un ataque de pánico”, sostuvo Morán y concluyó que por último, también “se puede ayudar a la persona a concentrarse pidiéndole que repita una tarea simple, como contar hasta diez”.

Sin embargo, recomienda que si “estos ataques de pánico son repetidos es necesario consultar con un profesional de la salud mental”. La Psicología incluye diversos abordajes terapéuticos para la ansiedad “que se han demostrado eficaces y útiles”, agrega.

La experta destaca “proporcionar a la persona información veraz sobre la ansiedad, su origen, mantenimiento y pronóstico; estrategias eficaces para la gestión de la ansiedad, como las técnicas de relajación y de regulación emocional; la exposición a la ansiedad y manejo de los pensamientos favorecedores de la misma y estrategias de afrontamiento y resolución de problemas”.

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