"Me alegro de que, a pesar de las acciones rusofóbicas de estos países (Lituania y Polonia), las autoridades locales vecinas de la región de Kaliningrado vean en el interés directo de su población el continuar la comunicación y no la construcción de muros", ha dicho este martes el titular ruso de Exteriores.
De este modo, Lavrov se ha referido al hecho de que Lituania iniciase el lunes la construcción de una valla a lo largo de la frontera de 44,6 kilómetros entre Rusia y Lituania, supuestamente para prevenir el contrabando y los cruces fronterizos ilegales.
En enero de 2016, el ministro del Interior de Lituania, Eimutis Misiunas, anunció la asignación de 3,6 millones de euros (3,8 millones de dólares), del presupuesto del país del Báltico, a la construcción de esta valla.
Me alegro de que, a pesar de las acciones rusofóbicas de estos países (Lituania y Polonia), las autoridades locales vecinas de la región de Kaliningrado vean en el interés directo de su población el continuar la comunicación y no la construcción de muros", ha dicho el canciller ruso, Serguei Lavrov.
En esta línea, el canciller ruso también ha ironizado la decisión del Gobierno polaco de suspender el acuerdo sobre "el pequeño tráfico fronterizo", aunque ha lamentado la poca probabilidad de que Varsovia cambie esta decisión.
Determinaciones de este tipo por parte de los países de Europa del Este se dan en línea con el drástico deterioro de las relaciones entre Rusia y el bloque occidental, liderado por EE.UU., tras el comienzo de la crisis de Ucrania y la posterior anexión de Crimea a la Federación Rusa.
Destacar que a raíz de los dos acontecimientos reseñados, Estados Unidos y la Unión Europea (UE) aprobaron varios paquetes de sanciones contra Moscú, que, a su vez, respondió imponiendo medidas de carácter similar.
aaf/anz/tmv/rba
