En el primer día de audiencia, Otto Pérez Molina, despotricó contra la Comisión internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) por insistir pedirle al juez que lo detuviera por existir peligro de fuga.
En el segundo día el Ministerio Público y CICIG continuaron presentando escuchas telefónicas que demostraban la forma de operar de la estructura criminal denominada La Línea. Al final de la presentación la CICIG hizo sus señalamientos formales.
Al tiempo que Molina declaraba en el banquillo de los acusados, en las calles continúan las muestras de satisfacción por el sometimiento del exmandatario a los tribunales de justicia, además exigen una profunda reforma al Estado, al final de la tarde al presidente le tembló la vos y dijo sentirse triste por lo que está atravesando.
Molina, exmilitar y primer presidente de Guatemala en ser procesado por corrupción regresará al encierro provisional como lo dictaminó el juez sin poder votar el domingo próximo que se celebran las elecciones generales en el país.
Miguel Salay, Guatemala
akm/msf