En una llamada telefónica mantenida este martes con su homólogo japonés, Takeshi Iwaya, el canciller de Irán, Seyed Abás Araqchi, ha destacado la firme posición de la República Islámica en proteger los intereses legítimos y los derechos inalienables del pueblo iraní a beneficiarse plenamente de la energía nuclear pacífica, incluido el enriquecimiento.
Araqchi también ha denunciado la decisión inapropiada de Estados Unidos y el trío europeo—El Reino Unido, Alemania y Francia— al presentar una resolución antiraní en la Junta de Gobernadores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) en medio de los diálogos indirectos entre Irán y Estados Unidos.
Al respecto, ha enfatizado que cualquier decisión irreflexiva y destructiva en la Junta de Gobernadores contra Irán recibirá una respuesta apropiada por parte de Teherán, y la responsabilidad por sus consecuencias recae en las partes que utilizan al organismo como herramienta a favor de sus intereses políticos.
El máximo diplomático iraní ha reiterado que, basándose en las enseñanzas islámicas, Irán nunca buscará armas nucleares, no obstante, no retrocede de los derechos de la nación iraní a usar la energía nuclear pacífica.
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