“En reacción a las intervenciones no convencionales del Reino Unido, incluso en el campo de la seguridad nacional de la República Islámica de Irán, Simon Shercliffe, el embajador del país en Teherán, fue convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores”, ha informado este sábado la Cancillería iraní en un comunicado.
En la reunión, el director general del Departamento de Europa Occidental en el Ministerio iraní transmitió al Gobierno británico la protesta de Teherán por las medidas destructivas de Londres que van en contra de la seguridad nacional de Irán.
Esto, después de la reacción de Londres a la ejecución del ex viceministro de Defensa iraní Alireza Akbari por cargos de espionaje para el Servicio de Inteligencia Secreto (MI6) del Reino Unido. Incluso, Londres ha anunciado la imposición de sanciones contra el fiscal general de Irán, Mohamad Yafar Montazeri, por la ejecución de Akbari.
En el encuentro también se reveló a Shercliff que Irán había obtenido información sólida sobre la comunicación no convencional de Londres con Akbari, alertando que el Gobierno británico debe rendir cuentas por el caso que violó la seguridad nacional del país persa.
Enfatizó que el “apoyo injustificado y malicioso” al agente espía no es compatible con la pretensión de relaciones basadas en el respeto mutuo.
El funcionario persa aseguró que una acción decisiva por Irán para salvaguardar su seguridad nacional no dependería del consentimiento de otros gobiernos, incluido el Reino Unido, y advirtió a Londres que no se tolerará en absoluto la continuación de tales actos ilegales y criminales.
El Gobierno británico debe aceptar las consecuencias de la continuación de un enfoque tan poco convencional e injerencista, agregó, señalando, además que, las leyes de Irán no reconocen la doble nacionalidad y, por lo tanto, la interferencia y los comentarios destructivos de Londres, con ese pretexto, no tienen base legal.
El diplomático iraní condenó una vez más cualquier movimiento amenazante e irrazonable contra la seguridad nacional y exigió al embajador británico trasladar el asunto a Londres.
La Inteligencia iraní desenmascaró al espía al proporcionarle información falsa y detalló que, aunque el MI6 logró captar a Akbari “y reclutarlo, seguramente no sabía qué parte de la información obtenida es guiada y engañosa”.
El Ministerio de Inteligencia de Irán ha dicho estar decidido a continuar con sus esfuerzos para identificar a espías y elementos infiltrados del enemigo en todos los niveles del aparato gubernamental y entregarlos a la justicia.
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