El embajador de Irán en Azerbaiyán, Seyed Abás Musavi, destacó el viernes el odio de las naciones musulmanas hacia el régimen usurpador y terrorista de Israel, dejando claro que no solo su presencia en la región es temporal, sino que la vergonzosa vida de ese ente está llegando a su fin.
“El régimen sionista nunca ha sido amigo de Estados y naciones musulmanes, y fortalecer y normalizar las relaciones con los países islámicos es un proyecto especial de ese régimen para crear división entre los países musulmanes, estabilizar la usurpación y la ocupación y continuar con sus crímenes contra la nación palestina y otras naciones musulmanas”, afirmó el diplomático iraní en una entrevista con los medios iraníes.
Por otro lado, dijo que la República Islámica de Irán no está interesada en que los países vecinos se conviertan en campo de batalla con Israel.
De modo que, continuó, si ese régimen piensa que, al acercarse a los vecinos de Irán, puede crear una brecha entre los países musulmanes y vecinos y crear una amenaza para Irán con su presencia, entonces debe saber que no ha elegido un camino correcto para esto, y definitivamente lo lamentará.
Sus declaraciones se producen luego de que el Gobierno de Azerbaiyán anunció el nombramiento de su primer embajador en los territorios ocupados, casi un mes después de informar que planea abrir una sede oficial en Tel Aviv.
Irán ha advertido una y otra vez que no toleraría “la presencia ni las actividades del régimen sionista en contra de su seguridad nacional y tomará las medidas necesarias al respecto”.
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