Mediante un comunicado emitido el jueves, la comunidad judía de Teherán, capital iraní, declaró que siempre sigue las pautas establecidas por el Líder de la Revolución Islámica de Irán, el ayatolá Seyed Ali Jamenei, y está al frente de la lucha contra quienes desean alterar el orden y la seguridad del país.
“Esta es una condena a los recientes disturbios que provocaron muerte y lesiones a varias personas en nuestro país, así como muchas pérdidas económicas”, se lee en el texto.
También, la comunidad hizo un llamado a todos los ciudadanos iraníes para que se abstengan de polarizar el país y se comuniquen con las autoridades en un ambiente pacífico ante ciertas deficiencias que, según la nota, “sin dudas beneficiarán a todos”.
De acuerdo al texto, los enemigos de Irán tienen la ilusión de crear inseguridad en la República Islámica y, para llegar a este objetivo, apuntan a la unidad del pueblo.
Durante los últimos dos meses, Irán ha sido escenario de los disturbios tras la muerte de la joven Mahsa Amini, quien perdió la vida el 16 de septiembre en un hospital días después de que fuera detenida por la Policía de Irán.
Teherán ve las huellas de Estados Unidos, Israel y varios Estados europeos y regionales en los recientes disturbios y advierte de que actuará con firmeza ante los que intenten socavar la seguridad nacional.
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