Hablando este miércoles en una reunión de la Junta de Gobernadores de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), el embajador iraní ante las organizaciones internacionales radicadas en Viena, la capital austriaca, Kazem Qaribabadi, ha recordado que la quinta ronda de diálogos entre Irán y el Grupo 4+1 sobre el acuerdo nuclear terminó la semana pasada, no obstante, aún no se han visto disposición y voluntad serias por parte de EE.UU., para dejar sus medidas unilaterales.
“Queda por ver si Estados Unidos tiene la determinación y la disposición necesarias para abandonar su adicción al uso de medidas coercitivas unilaterales, así como para respetar el derecho internacional, cumplir con sus compromisos de eliminar total y efectivamente las sanciones [contra Teherán] y tomar las decisiones difíciles necesarias en este sentido”, ha afirmado.
El diplomático persa ha denunciado que han pasado tres años desde que EE.UU. tomó la decisión “unilateral e injustificada” de retirarse del acuerdo nuclear, violar sus compromisos en virtud del mismo pacto, socavar la Resolución 2231 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (CSNU) que refrenta el pacto, y perseguir su “fallida” política de ‘máxima presión’ contra Teherán.
Qaribabadi también ha manifestado que las dimensiones extraterritoriales de las sanciones estadounidenses impidieron que los aliados europeos de Washington cumplieran con sus obligaciones estipuladas en el acuerdo nuclear, de nombre oficial Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés).
Pese a esto, Qaribabadi ha recordado que la decisión de Irán de suspender algunos de sus compromisos en el acuerdo nuclear en respuesta al incumplimiento de otras partes, no afectó su cooperación con la AIEA.
“Incluso en tales circunstancias, la AIEA pudo verificar y monitorear lo que Irán había hecho al respecto, lo que fue reconocido como una cooperación ‘excepcional’ incluso durante el brote del coronavirus”, ha expresado.
El funcionario iraní ha dejado claro que Irán ha asistido “de manera firme y decidida” a las conversaciones que se desarrollan en Viena con los firmantes restantes del acuerdo para reactivar el pacto.
“Es importante que los esfuerzos conduzcan a garantías adecuadas de que todas las sanciones serán levantadas de manera verificable, y no volvamos a enfrentarnos a una situación crítica resultante de la salida de EE.UU. del acuerdo, abuso de los mecanismos en el PIAC o violaciones de todas las obligaciones en virtud del mismo, mientras que Irán se ha comprometido plenamente con las disposiciones del PIAC”, ha dejado claro.
Ha afirmado que la pelota está en la cancha de Estados Unidos para demostrar su conformidad con el derecho internacional.
“Irán, por su parte, ha declarado una y otra vez que revertirá sus medidas compensatorias y reanudará sus compromisos nucleares” cuando EE.UU. vuelva a implementar sus compromisos y levante las sanciones “de manera plena, efectiva y verificable”.
Las alertas de Qaribabadi sobre la falta de la voluntad de EE.UU. se producen mientras la oportunidad para salvar el acuerdo nuclear se está acabando, ya que se espera que la próxima ronda de diálogos en Viena sea la última.
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