El líder del Movimiento Islámico de Nigeria (IMN, por sus siglas en inglés), que junto a su esposa fue detenido desde el diciembre de 2015 por el Gobierno de Nigeria, ha llegado este martes a Nueva Delhi, la capital india, para recibir atención médica por su crítico estado de salud.
El portavoz de la Cancillería de la República Islámica de Irán, Seyed Abás Musavi, ha expresado hoy su esperanza de que la presencia del clérigo musulmán fuera de su país natal abra una oportunidad para resolver las diferencias que han surgido en los últimos años entre el IMN y el Gobierno nigeriano, de modo que se garantice los derechos de la comunidad chií y se allane el camino para la liberación de los presos y las restricciones impuestas al movimiento.
Tras manifestar su deseo de que el líder musulmán nigeriano pueda recuperarse completamente de sus problemas de salud en este viaje, el diplomático ha subrayado la predisposición de Irán para ofrecer toda la ayuda necesaria para tal recuperación. “La República Islámica apoya este proceso (del tratamiento médico) y declara su disposición para ofrecer cualquier asistencia necesaria para ello”, ha indicado.
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La República Islámica apoya este proceso (del tratamiento médico) y declara su disposición para ofrecer cualquier asistencia necesaria para ello”, ha indicado el portavoz de la Cancillería de la República Islámica de Irán, Seyed Abás Musavi, tras la llegada del líder nigeriano el sheij Ibrahim al-Zakzaky a La India para recibir atención médica.
JUST IN: Shiites leader, Elzakzaky, wife Zeenah arrive India for medical treatment. -TheWailersNG pic.twitter.com/YGQCmW3Edt
— The Nigerian Wailers (@NGRWailers) August 13, 2019
Al-Zakzaky y su esposa viajaron el lunes a La India luego de que el Ejecutivo nigerino permitiera su salida bajo unas estrictas condiciones de vigilancia y en conformidad con la sentencia de una corte, según la cual, el prominente líder musulmán debía recibir tratamiento médico por su precario estado de salud.
Ellos habían sido detenidos tras una violenta redada policial en su residencia, en la ciudad norteña de Zaria, en el estado de Kaduna. Durante el brutal arresto del clérigo, de 66 años, por las fuerzas nigerianas, que tienen estrechos lazos con el régimen saudí, tres de sus hijos perdieron la vida, su esposa sufrió heridas graves y más de 300 de sus seguidores fueron asesinados.
El 6 de julio, el hijo de Al-Zakzaky advirtió sobre el deterioro de la salud de su padre, explicando que los médicos habían encontrado altos niveles de plomo y cadmio en su sangre, por lo que resultaba necesario que el clérigo recibiera atención medica de manera urgente.
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El IMN, en un comunicado emitido el lunes, celebró la “victoria” cosechada tras un largo periodo de resistencia que ha llevado a la concesión de un permiso médico para el encarcelado líder musulmán.
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