En manifestaciones realizadas el sábado en Tel Aviv y varias otras ciudades israelíes, los israelíes exigieron al premier sionista, Benjamín Netanyahu, un acuerdo de alto el fuego con el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) que permita el retorno de los retenidos.
Los congregados portaban pancartas, en las cuales se podría leer eslóganes contra la guerra como “No a controlar Gaza”.
Con el paso del tiempo y el aumento del descontento social, la idea de un acuerdo logrado por el gabinete de Netanyahu para liberar a los retenidos parece cada vez más improbable y da pie a la demanda de una convocatoria de elecciones anticipadas en los territorios ocupados.
El 5 de noviembre, Netanyahu cesó al ministro de asuntos militares, Yoav Gallant, debido a discrepancias sobre la estrategia militar en Gaza. Esta acción provocó, por su parte, manifestaciones masivas en Tel Aviv y otras ciudades, donde decenas de personas fueron detenidas.
En general, principales demandas de los israelíes en las protestas a partir de la guerra contra Gaza son cese al fuego y negociaciones, dimisión de Netanyahu y reformas políticas.
Se estima que 101 rehenes israelíes permanecen en la Franja de Gaza. De estos, aproximadamente 40 se cree que siguen con vida.
La entidad sionista ha obstruido cualquier acuerdo de canje de presos con HAMAS y ni ha aceptado una tregua para Gaza. Mientras tanto, se le acusa a Netanyahu de priorizar su supervivencia política.
HAMAS advierte que no liberará a ningún retenido israelí antes de que se detenga la guerra y se retiren todas las fuerzas de ocupación de la Franja de Gaza.
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