Qazi Hamad, un miembro de la oficina política del Movimiento de la Resistencia Islámica Palestina (HAMAS), ha dicho este domingo en una entrevista con la agencia de noticias palestina Samanews que “el régimen de Israel, perpetrando graves crímenes inhumanos [en la Franja de Gaza], está a punto de derrumbarse a nivel interno, social, militar y político”.
El contexto actual, “brinda una oportunidad a todos los grupos palestinos de adoptar una postura firme y obligar a la comunidad internacional a reclamar los derechos de nuestra nación”, agrega el titular de HAMAS.
Además, dice que HAMAS cuenta con una “palanca de presión muy fuerte” y las capacidades necesarias para confrontar al enemigo sionista. “No aceptamos que vuelvan a mentir al pueblo palestino. Israel no puede imponer una solución política mediante una nueva realidad”, ha acentuado.
“Tenemos la oportunidad para cambiar la historia”, ha recalcado Hamad para luego advertir a la Autoridad Nacional Palestina y otras facciones de que repetir las posturas estadounidenses es “una vergüenza”.
Recientemente, Israel y EE.UU. evalúan en secreto planes siniestros para desplazar a la población de Gaza al desierto egipcio de Sinaí y encontrar un sustituto al movimiento HAMAS para administrar la Franja una vez, terminada la guerra, ha aseverado.
Además, el alto funcionario de HAMAS ha señalado que actualmente se observan muchas “perplejidades y desacuerdos entre las autoridades israelíes”. En efecto, los medios hebreos dan cuenta del descontento de los israelíes por cómo el gabinete del primer ministro Benjamín Netanyahu maneja la guerra en Gaza, al no haber podido cumplir sus objetivos declarados de acabar con HAMAS y retornar a los retenidos israelíes.
En otra parte de sus declaraciones, Hamad ha elogiado a Sudáfrica por su “gran” posición en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) al sostener su demanda contra Israel por cometer genocidio en el sitiado enclave costero, y ha asegurado que la medida de Pretoria “pasará a la historia”.
Los bombardeos indiscriminados y la ofensiva terrestre del ejército de ocupación contra el sitiado enclave costero han dejado un saldo de más de 25 100 muertos, en su mayoría, niños y mujeres, y al menos 62 000 heridos, de acuerdo con estimaciones oficiales.
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