“Decimos a los ocupantes que la guerra aún está en sus comienzos y que lo que les espera es aún peor”, ha enfatizado este martes el representante del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) en Beirut, capital libanesa, Osama Hamdan, haciendo referencia al combate en curso en Gaza que continúa por más de cinco semanas.
Ha hecho hincapié en que la Resistencia palestina, particularmente las Brigadas Al-Qassam —el ala militar de HAMAS—, se encuentra en buen estado y tiene bajo su control la situación.
Hamdan ha condenado los implacables ataques israelíes a las infraestructuras vitales y hospitales en Gaza, y advertido que todos estos crímenes tienen como objetivo forzar a la población a abandonar el enclave.
“El objetivo de los ocupantes de desalojar al pueblo palestino de la Franja es repetir el Día de la Nakba [o catástrofe]”, ha agregado, en alusión al día que marcó la expulsión forzada de 750 000 palestinos de sus hogares, y la creación del régimen de Israel en 1948.
Ha dicho que HAMAS está totalmente dispuesto a realizar un canje de presos, y ha culpado al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por retrasar el acuerdo. “Sin la liberación de los prisioneros palestinos, no sucederá nada y Netanyahu busca prolongar la guerra por razones personales y no le importan los israelíes y sus soldados en el campo de batalla”, detalla.
El dirigente de HAMAS ha instado a los familiares de los cautivos que presionen al gabinete de Netanyahu para que acepte un canje de presos y que “no pierda el tiempo porque el tiempo casi se está agotando”.
HAMAS mantiene bajo su custodia a unos 250 cautivos que fueron retenidos durante su masiva operación ‘Tormenta de Al-Aqsa’ llevada a cabo el pasado 7 de octubre contra los territorios ocupados por el régimen de Israel.
El número de muertos palestinos desde el inicio de la agresión israelí contra Gaza —iniciada también el 7 de octubre— aumenta a 11 320, incluidos 4650 niños y 3145 mujeres, según el último balance.
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