El gabinete de coalición israelí enfrenta una nueva crisis tras perder el lunes una votación sobre los asentamientos en Cisjordania ocupada, en la que la oposición impidió la renovación de una histórica ley que extiende la legislación israelí a los habitantes de colonias.
Esta derrota podría tener un fuerte impacto en el gabinete, que se encuentra en crisis luchando por sobrevivir.
“Que Bennett se vaya a casa. Se acabó todo. Es hora de devolver a Israel a la derecha”, dijo el ex primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, dirigiéndose a su sucesor, en la sesión parlamentaria.
Además de Netanyahu, otros opositores también cuestionaron la gestión de Bennett. “Este gabinete no tiene derecho a existir”, gritaban los opositores al respecto.
Ante tal situación, los diputados del gabinete y los de la oposición se involucraron en una pelea, según recogieron los medios locales.
El gabinete de Israel se enfrenta a varios desafíos que amenazan su disolución, pues está formado por una coalición de varias facciones que pugnan para lograr un equilibrio.
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Mientras tanto, por medio de un mensaje difundido el viernes, Bennett afirmó que el régimen está “enfrentando una prueba real”, ya que experimenta una situación sin precedentes que lo está dirigiendo al colapso.
De hecho, alertó del caos, las elecciones repetidas y la continua parálisis de las administraciones del régimen en los últimos años, y recalcó que Israel ha llegado a uno de los momentos más tensos de su declive.
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