Abu Obeida, el portavoz de las Brigadas Ezzedin Al-Qassam, el brazo armado del Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS), ha informado la madrugada de este domingo de “un gran ataque con decenas de cohetes contra Tel Aviv (centro) y sus suburbios y, al mismo tiempo, contra Ashdod (oeste)”, en represalia por el ataque israelí contra torres civiles en la Franja de Gaza.
Previo a este ataque, el brazo armado de HAMAS había alertado que no atacaría Tel Aviv entre las 10 p.m. (hora local) y medianoche. Tras la pausa de dos horas, la parte palestina ha reanudado sus lanzamientos de proyectiles contra Tel Aviv.
#BREAKING: Rockets launched towards central Israel pic.twitter.com/7gnIpGUHUh
— Amichai Stein (@AmichaiStein1) May 15, 2021
“Por orden del jefe del Estado Mayor Muhamad Al-Deif, el toque de queda en Tel Aviv y sus alrededores se levanta durante dos horas desde las 10 hasta la medianoche de esta noche. Entonces volverán a esperar tensamente lo que está por venir”, ha declarado Abu Obeida.
El movimiento palestino ha prometido también que intensificará sus ataques, si Israel continúa sus agresiones y la destrucción de edificios residenciales de gran altura en Gaza.
Tras este ataque de represalia palestina, las sirenas de alarma se activaron en todo Tel Aviv, el aeropuerto Ben Gurion y en el sur de los territorios ocupados por Israel.
Este ataque se produce horas después de que el brazo armado de HAMAS anunciara que se había “preparado para bombardear Tel Aviv durante un período de 6 meses continuos” y prometido que haría “temblar Tel Aviv” con sus misiles en respuesta al bombardeo israelí contra una torre civil en Gaza.
“Después de amenazar con disparar cohetes contra Tel Aviv, HAMAS ha lanzado una fuerte andanada de cohetes desde Gaza hacia el centro y el sur de Israel”, ha confirmado el ejército israelí en su cuenta de Twitter.
El sábado, las Brigadas Ezzedin al-Qassam lanzaron también un ataque con decenas de misiles contra Tel Aviv en respuesta a un bombardeo israelí sin previo aviso sobre el campo de refugiados palestinos de Al-Shati, situado en el norte del enclave costero, en el que murieron al menos diez miembros de una misma familia. Las víctimas, ocho niños y dos mujeres, se encontraban en un edificio de tres pisos.
Según el último balance de las autoridades palestinas, al menos 145 personas han muerto en Gaza, entre ellas 41 niños y 23 mujeres, desde el inicio de la ofensiva israelí el pasado lunes, y unas 1100 han resultado heridas.
Desde el comienzo del conflicto desatado a raíz de la violencia perpetrada por parte de Israel contra la nación palestina en Al-Quds (Jerusalén), 10 israelíes también han muerto y decenas más han resultado heridos.
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