Según reportes preliminares, el operativo de seguridad tuvo lugar en la colonia Loma Linda y derivó en enfrentamientos entre policías y supuestos delincuentes.
Los hechos se registraron cuando los efectivos policiales detuvieron un vehículo y las personas que viajaban en su interior respondieron con armas de fuego, hiriendo a dos uniformados.
Tras la balacera, miembros de las fuerzas especiales acudieron al lugar y persiguieron a los agresores hasta su escondite, un domicilio donde se encontraban otros civiles armados. Allí se desató el enfrentamiento, que dejó un saldo de nueve civiles armados muertos, probables miembros de un grupo criminal.
Luego de los tiroteos, las autoridades declararon “situación de riesgo en la zona” y pidieron a los pobladores alejarse de las inmediaciones. Un poco más tarde, se reportó que la situación estaba bajo control y se adelantaron las investigaciones en el lugar.
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