El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Seyed Abás Araqchi, ha recordado este lunes al director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Rafael Grossi, la necesidad de que la organización que dirige cumpla profesionalmente las funciones asignadas, en referencia a los alegatos del reciente informe sobre el programa nuclear pacífico de Irán.
Araqchi ha hecho estas declaraciones en una reunión trilateral con Grossi y su homólogo egipcio, Badr Abdel Aaty, en El Cairo, la capital de Egipto, donde se encuentra de visita oficial.
El pasado 31 de mayo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Islámica, junto a la Organización de Energía Atómica de Irán, deploró las manipulaciones contenidas en el último informe emitido por la AIEA sobre el programa nuclear iraní.
Más tarde, en un diálogo telefónico, el canciller iraní instó a Grossi a aclarar la cooperación de Teherán con la Agencia durante la reunión de la Junta de Gobernadores a llevarse a cabo la próxima semana.
En tal sentido, Araqchi ha vuelto a insistir esta misma jornada a Grossi que la AIEA “no debe permitir que su credibilidad se vea socavada por motivos políticos y presiones de algunos Estados miembros”.
Por su parte, Grossi ha calificado de “oportuno” el intercambio sostenido en El Cairo con los ministros de Asuntos Exteriores de Irán y Egipto, en un mensaje publicado este propio lunes en su cuenta de X.
El director de la AIEA ha expresado su agradecimiento “por el papel constructivo de Egipto al apoyar la paz y la diplomacia”.
En reiteradas ocasiones, Irán ha exigido a la Agencia Internacional de la Energía Atómica apego a la verdad en sus informes sobre el programa nuclear.
En abril pasado, el canciller de Irán reclamó igualmente a la AIEA adoptar una postura firme ante las amenazas contra las instalaciones nucleares de la República Islámica.
Irán ha manifestado siempre su voluntad de cooperación con la Agencia, y al mismo tiempo ha dejado claro que su programa nuclear mantiene un estricto carácter pacífico.
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